Jueves 17 de Marzo de 2011
Jueves 1ª semana de Cuaresma 2011
Ester 14,1.3-5.12-14
En aquellos días, la reina Ester, temiendo el peligro inminente, acudió al
Señor y rezó así al Señor, Dios de Israel: "Señor mío, único rey nuestro.
Protégeme, que estoy sola y no tengo otro defensor fuera de ti, pues yo misma me
he expuesto al peligro. Desde mi infancia oí, en el seno de mi familia, cómo tú,
Señor, escogiste a Israel entre las naciones, a nuestros padres entre todos sus
antepasados, para ser tu heredad perpetua; y les cumpliste lo que habías
prometido. Atiende, Señor, muéstrate a nosotros en la tribulación, y dame valor,
Señor, rey de los dioses y señor de poderosos. Pon en mi boca un discurso acertado
cuando tenga que hablar al león; haz que cambie y aborrezca a nuestro enemigo,
para que perezca con todos sus cómplices. A nosotros, líbranos con tu mano; y a
mí, que no tengo otro auxilio fuera de ti, protégeme tú, Señor, que lo sabes todo."
Salmo responsorial: 137
R/Cuando te invoqué, me escuchaste, Señor.
Te doy gracias, Señor, de todo corazón; / delante de los ángeles tañeré para
ti, / me postraré hacia tu santuario. R.
Daré gracias a tu nombre, / por tu misericordia y tu lealtad; / cuando te
invoqué, me escuchaste, / acreciste el valor en mi alma. R.
Tu derecha me salva. / El Señor completará sus favores conmigo: / Señor, tu
misericordia es eterna, / no abandones la obra de tus manos. R.
Mateo 7,7-12
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Pedid y se os dará, buscad y
encontraréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide recibe, quien busca
encuentra y al que llama se le abre. Si a alguno de vosotros le pide su hijo pan, ¿le
va a dar una piedra?; y si le pide pescado, ¿le dará una serpiente? Pues si vosotros,
que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro
Padre del cielo dará cosas buenas a los que le piden! En resumen: Tratad a los
demás como queréis que ellos os traten; en esto consiste la Ley y los
profetas. "
COMENTARIOS
Corre por internet el cuento del nio que grit en la montaa: “Estúpido” y el
eco le repiti “Estúpido”. El padre le explic al nio que la vida es como el eco, y lo
invit a gritar cosas agradables: “Te quiero”, grit el nio, y el eco repiti: “Te
quiero”.
Esta catequesis del evangelio de hoy sobre la oración parece no hallar lugar
en nuestras vidas. ¿Por qué necesita Dios que le pidamos si Él ya sabe lo que
necesitamos? Porque la oración es en nuestras manos la herramienta que nos
educa para hablar con nuestro Padre. Y es la herramienta que Él tiene en sus
manos para educarnos en su amistad. No tenemos más que ver a los niños
malcriados a quienes nunca se les negó nada, para darnos cuenta del bien que nos
hace la oración de súplica sencilla, confiada y agradecida. Esta enseñanza de Jesús
termina con la llamada “Regla de oro”: “Traten a los demás como quieren que los
demás les traten”. El curioso dinamismo del eco… Y con esto, Jesús resumi
sencillamente todos los libros del Antiguo Testamento.
Juan Alarcón S.J
(Extracto de SERVICIOS KOINONÍA)