Carta del Obispo de Posadas para el domingo de la Ascensión del Señor 05 de junio de 2011.
(JORNADA MUNDIAL DE LAS COMUNICACIONES):
“LA COMUNICACIÓN EN LA ERA DIGITAL”.
En este domingo de la Ascensión del Señor la Iglesia celebra en todo el mundo la 45º (XLV) Jornada
Mundial para las Comunicaciones Sociales. Especialmente queremos tener presente en nuestra oración
y reflexión a los comunicadores, llamados a vivir esta vocación y misión en nuestro tiempo.
Todos sabemos de la importancia de las comunicaciones y de la necesidad de sostener algunos valores
como la verdad, la justicia, la libertad y el sentido ético para que su servicio este en función del bien
común.
El Papa habitualmente nos envía un mensaje, proponiéndonos para este año 2011 un tema que necesita
nuestra reflexión sobre la “comunicación a través de Internet”. El Papa nos dice: “Deseo compartir
algunas reflexiones, motivadas por un fenómeno característico de nuestro tiempo: la propagación de las
comunicaciones a través de Internet. Se extiende cada vez más la opinión de que, así como la revolución
industrial produjo un cambio profundo en la sociedad, por las novedades introducidas en el ciclo
productivo y en la vida de los trabajadores, la amplia transformación en el campo de las comunicaciones
dirige las grandes mutaciones culturales y sociales de hoy. Las nuevas tecnologías no modifican solo el
modo de comunicar, sino la comunicación en si misma, por lo que se puede afirmar, que nos
encontramos ante una vasta transformación cultural. Junto a ese modo de difundir información y
conocimientos, nace un nuevo modo de aprender y pensar, así como nuevas oportunidades para
establecer relaciones y construir lazos de comunión”.
Desde ya que partiendo de una especial valoración de las nuevas tecnologías de las comunicaciones, el
Papa considera la necesidad de discernir sus límites, para que realmente sea un “instrumento” al
servicio de la persona y la dignidad humana.
En esta carta dominical quiero señalar algunos temas que pueden ser útiles para que nosotros mismos
reflexionemos sobre como usamos estos nuevos instrumentos comunicacionales.
El Papa nos dice: “La presencia en estos espacios virtuales pueden ser expresión de una búsqueda
sincera de un encuentro personal con el otro, si se evitan ciertos riesgos, como buscar refugio en una
especie de mundo paralelo, o una excesiva exposición al mundo virtual. El anhelo de compartir, de
establecer “amistades”, implica el desafío de ser auténticos, fieles a sí mismos, sin ceder a la ilusión de
construir artificialmente el propio “perfil público”…
¿Quién es un “prójimo” en este nuevo mundo? ¿Existe el peligro de estar presentes con quienes
encontramos en nuestra vida cotidiana, ordinaria? ¿Tenemos el peligro de caer en la dispersión, dado
que nuestra atención esta fragmentada y absorta en un mundo “diferente” al que vivimos? ¿Dedicamos
tiempo a reflexionar críticamente sobre nuestras decisiones y alimentar relaciones humanas que sean
realmente profundas y duraderas? Es importante recordar siempre que el contacto virtual no puede y no
debe sustituir al contacto humano directo, en todos los aspectos de nuestra vida.
También en la era digital, cada uno siente la necesidad de ser una persona auténtica y reflexiva.
Además, las redes sociales muestran que uno está siempre implicado en aquello que comunica. Cuando
se intercambian informaciones, las personas se comparten a sí mismas, su visión del mundo, sus
esperanzas, sus ideales. Por eso se puede decir que existe un estilo cristiano de presencia también en el
mundo digital, caracterizado por una comunicación franca y abierta, responsable y respetuosa del otro.
Comunicar el Evangelio a través de los nuevos medios, significa no solo poner contenidos abiertamente
religiosos en las plataformas de los diversos medios, sino también dar testimonio coherente en el propio
perfil digital y en el modo de comunicar preferencias, opciones y juicios que sean profundamente
concordes con el Evangelio, incluso cuando se hable explícitamente de él…El compromiso de ser
testigos del Evangelio en la era digital debe transformarse en alimento cotidiano y no en atracción de un
momento”.
El Papa especialmente invita a los jóvenes a hacer buen uso de su presencia en el espacio digital. Y
también podríamos recordar a los comunicadores, educadores y familias la responsabilidad que les
compete en el uso responsable y en la búsqueda de que estos “dones” y “nuevos instrumentos” sirvan
para construir con esperanza.
Un saludo cercano y hasta el próximo domingo Juan Rubén Martínez .