Comentario al evangelio del Martes 05 de Febrero del 2013
Queridos amigos y amigas:
El evangelio de hoy debe sobrecogernos si somos capaces de no perdernos en lo anecdótico.
Alrededor de Jesús surge la vida, la muerte es vencida y los sin-esperanza renacen. Jesús aparece ante
nosotros como el único médico capaz de dar al ser humano su genuina dignidad, la paz autentica, la
vida verdadera.
Ojalá los cristianos supiéramos de verdad celebrar la vida, es decir, esperar contra toda esperanza que
la VIDA es más fuerte que la muerte. Esta aparece siempre más poderosa, porque la violencia, el
caos,... son su rostro, y el amor ¡parece tan débil!. Sobre todo hoy que vivimos en un mundo que al
mismo tiempo que exalta y defiende la vida, la juventud, la diversión, el ocio... inventa nuevas formas
de muerte.
Celebremos la vida nueva que surgió de la muerte de Jesús, aquí debemos aprender a leer el misterio
de la vida, tan cercano siempre a la muerte. Pues la vida está ligada esencialmente al amor, y ¿en que
consiste amar sino en dar la vida libremente hasta la muerte?
El odio, el egoísmo, la insolidaridad, la injusticia, la pasividad engendran muerte. Quién lucha contra
las formas de muerte, crea y comunica vida. Quién arriesga su vida y corre la carrera que le toca, sin
retirarse, cansarse, desanimarse; quien da su vida por amor hace posible la esperanza y la vida de los
otros. Sólo el amor crea vida y la devuelve a quien la ha perdido.
Vuestra hermana en la fe
Rosa Pérez
Rosa Pérez