Palabra de Dios
para alimentar tu día
Fr. Nelson Medina F., O.P
Cuaresma,
Semana No. 1, Miércoles
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Lecturas de la S. Biblia
Temas de las lecturas: Los ninivitas se convirtieron de su mala vida * Un corazón
quebrantado y humillado, tú, Dios mío, no lo desprecias. * A esta generación no se
le dará más signo que el signo de Jonás
Textos para este día:
Jonás 3,1-10:
Vino la palabra del Señor sobre Jonás: "Levántate y vete a Nínive, la gran ciudad, y
predícale el mensaje que te digo." Se levantó Jonás y fue a Nínive, como mandó el
Señor. Nínive era una gran ciudad, tres días hacían falta para recorrerla. Comenzó
Jonás a entrar por la ciudad y caminó durante un día, proclamando: "¡Dentro de
cuarenta días Nínive será destruida!" Creyeron en Dios los ninivitas; proclamaron el
ayuno y se vistieron de saco, grandes y pequeños.
Llegó el mensaje al rey de Nínive; se levantó del trono, dejó el manto, se cubrió de
saco, se sentó en el polvo y mandó al heraldo a proclamar en su nombre a Nínive:
"Hombres y animales, vacas y ovejas, no prueben bocado, no pasten ni beban;
vístanse de saco hombres y animales; invoquen fervientemente a Dios, que se
convierta cada cual de su mala vida y de la violencia de sus manos; quizá se
arrepienta, se compadezca Dios, quizá cese el incendio de su ira, y no
pereceremos." Y vio Dios sus obras, su conversión de la mala vida; se compadeció
y se arrepintió Dios de la catástrofe con que había amenazado a Nínive, y no la
ejecutó.
Salmo 50 :
Misericordia, Dios mío, por tu bondad, / por tu inmensa compasión borra mi culpa;
/ lava del todo mi delito, / limpia mi pecado. R.
Oh Dios, crea en mí un corazón puro, / renuévame por dentro con espíritu firme; /
no me arrojes lejos de tu rostro, / no me quites tu santo espíritu. R.
 
Los sacrificios no te satisfacen: / si te ofreciera un holocausto, no lo querrías. / Mi
sacrificio es un espíritu quebrantado; / un corazón quebrantado y humillado, / tú no
lo desprecias. R.
Lucas 11,29-32:
En aquel tiempo, la gente se apiñaba alrededor de Jesús, y él se puso a decirles:
"Esta generación es una generación perversa. Pide un signo, pero no se le dará más
signo que el signo de Jonás. Como Jonás fue un signo para los habitantes de Nínive,
lo mismo será el Hijo del hombre para esta generación. Cuando sean juzgados los
hombres de esta generación, la reina del Sur se levantará y hará que los condenen;
porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de
Salomón, y aquí hay uno que es más que Salomón. Cuando sea juzgada esta
generación, los hombres de Nínive se alzarán y harán que los condenen; porque
ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es más que
Jonás."
Homilía
Temas de las lecturas: Los ninivitas se convirtieron de su mala vida * Un corazón
quebrantado y humillado, tú, Dios mío, no lo desprecias. * A esta generación no se
le dará más signo que el signo de Jonás
1. Rectificar el camino
1.1 Es humilante y doloroso darse cuenta de un error y por eso nuestro ego suele
resistirse a reconocer sus fallas. A través de disculpas o de intentar echar la culpa a
otros pretendemos ocultar nuestras equivocaciones. A menudo este proceder
conduce a que sean maltratados inocentes y a que nosotros mismos multipliquemos
nuevas fallas y desaciertos.
1.2 En realidad el camino más sencillo para librarse de los errores es reconocerlos.
He leído que el empresario más rico del mundo actualmente, Bill Gates, tiene como
estrategia difundir con rapidez y precisión de los errores que aparecen en los
productos de Microsoft o en sus métodos de mercadeo.
1.3 La idea es que cuando algo sale mal todo el mundo en la empresa debe saber
que eso salió mal y debe enterarse de por qué salió mal. Sin embargo, el énfasis
nunca está en quién fue el "culpable" pues no se trata de un ejercicio de justicia
sino de una política de entrenamiento continuo. Es como poner a todo Microsoft a
aprender todos los días cómo hacer las cosas mejor por vía de reconocer con
honesta sencillez qué salió mal.
1.4 El fruto de esta estrategia de Gates es notable: todo el mundo, también yo,
tiene algo qué criticarle a Microsoft y sus productos, pero ello no exaspera a este
genio de los sistemas, pues su actitud de mantenerse rectificando el camino
SIEMPRE convierte cada crítica en una oportunidad.
1.5 Tal vez no sobre aclarar que mi admiración por este aspecto de la vida de Bill
Gates no me hace menos crítico de muchas otras cosas de su modo de obrar y de
enriquecerse. Pero nada nos impide aprender de aquellos con los que no estamos
de acuerdo incluso en cosas esenciales.
2. Hacer penitencia
2.1 La cuaresma quiere que hagamos el ejercicio honesto de rectificar nuestros
caminos reconociendo nuestros errores. Mas además del reconocimiento de errores
hay algo que se nos invita a hacer: penitencia.
2.2 La penitencia es uno de los conceptos de más difícil comprensión para nuestra
época. Habla tú de penitencia y la gente creerá que estás contando historias de
mentes enfermizas, almas masoquistas o clérigos de oscuras tendencias sádicas. La
morbosidad ronda al tema de la penitencia y crea una nube pegajosa que no nos
deja reconocer la belleza que también tiene este aspecto de la vida cristiana.
2.3 Hacer penitencia es al alma lo que un gimnasio es para el cuerpo. ¿Has visto la
cara que hace la gente mientras levanta pesas o estira durísimos resortes? No son
rostros sonrientes y tranquilos, sino imágenes de un esfuerzo tenaz y a veces
incluso de dolor. Pero ese dolor tiene un sentido, que es la reforma del cuerpo.
Después de esas "torturas" repetidas durante días o semanas, van desapareciendo
las formas indeseables y el cuerpo adquiere el perfil que se quería.
2.4 Algo así es la penitencia para el alma: a través del dominio de nosotros mismos
nos volvemos escultores de nuestra vida y recuperamos posesión de nuestros
sentidos y emociones. El ayuno, así como otras formas de penitencia, son un
verdadero gimnasio en el que alcanzamos belleza no para este mundo sino para la
eternidad.
Fr. Nelson Medina, O.P.