ARQUIDIÓCESIS DE BUCARAMANGA
PARROQUIA “SAN JUAN MARIA VIANNEY”
KRA 8 No 8N-264, BUCARAMANGA – TEL: 6731908
HORARIOS DE MISAS DE MARTES A SÁBADO: 6:00 P.M.
Domingos: 7:00 a.m. ,9:00 a.m. y 6:00 p.m. en el Templo parroquial
ALABANZA TODOS LOS VIERNES A LAS 6:00 P.M. A 8:00P.M.
GRUPO JUVENIL “TOCANDO CORAZONES” SABADOS 5:00 P.M.
TALLERES DE ORACIÓN “P. LARRAÑAGA” SÁBADOS 6:00 P.M. A 8:00 P.M.
Domingo IV de Cuaresma (C)
(Domingo 10 de marzo de 2013)
LECTIO DIVINA DEL EVANGELIO DE LA MISERICORDIA
PRESENTACIÓN El evangelio de Lucas es conocido como el « Evangelio de la Misericordia ». Todo él
puede ser leído como un gran relato que nos sumerge en el amor entrañable del Padre. Jesús es el gran
protagonista: a través de sus palabras y sus acciones se revela el rostro misericordioso de Dios. Ayer
como hoy, siempre el rostro de misericordia de Dios se deja traslucir en el rostro de los hijos los padres,
en una palabra de acuerdo como vivamos nuestra experiencia de padre o experiencia de hijo menor o
hijo mayor, así será nuestras formas de relacionarnos en el tono afectivo, en principio el amor es un
encuentro entre dos personas que entablan una amistad duradera, ahí se encuentra el mensaje central.
Antes de leer este texto preparémonos en oración un momento de silencio, tal vez antes de hacer
lecturas prejuiciosas, busquemos al Señor Jesús en la misma, no podemos conformarnos con una lectura
superficial, sino comprender este texto desde su principio vital, esto es el texto es tan antiguo y nuevo
que nos habla, santa Teresa nos decía que 1.000 veces te leí, 1.000 veces te comprendí, 1.000 veces
me enamoré… podemos nosotros volver continuamente sobre este texto y encontraremos siempre
nuevos significados y experimentamos el amor siempre nuevo de su voz de padre en el calor de hogar e
hijo arrepentido.
Lectura del libro de Josué 4, 19; 5, 10-12
Después de atravesar el Jordán, los israelitas entraron en la tierra prometida el día diez del primer mes, y
acamparon en Guilgal. El catorce de ese mes, por la tarde, celebraron la Pascua en la llanura de Jericó.
Al día siguiente de la Pascua, comieron de los productos del país —pan sin levadura y granos tostados—
ese mismo día.
El maná dejó de caer al día siguiente, cuando comieron los productos del país. Ya no hubo más maná
para los israelitas, y aquel año comieron los frutos de la tierra de Canaán.
Palabra de Dios.
Salmo Responsorial 33, 2-7
R. ¡Gusten y vean que bueno es el Señor!
Bendeciré al Señor en todo tiempo,
su alabanza estará siempre en mis labios.
Mi alma se gloría en el Señor:
que lo oigan los humildes y se alegren. R.
Glorifiquen conmigo al Señor,
alabemos su Nombre todos juntos.
Busqué al Señor: Él me respondió
y me libró de todos mis temores. R.
Miren hacia Él y quedarán resplandecientes,
y sus rostros no se avergonzarán.
Este pobre hombre invocó al Señor:
Él lo escuchó y lo salvó de sus angustias. R.
Dios nos reconcilió con Él por intermedio de Cristo
Lectura de la segunda carta del Apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto 5, 1 7-21
Hermanos:
El que vive en Cristo es una nueva criatura: lo antiguo ha desaparecido, un ser nuevo se ha hecho
presente. Y todo esto procede de Dios, que nos reconcilió con Él por intermedio de Cristo y nos confió el
ministerio de la reconciliación. Porque es Dios el que estaba en Cristo, reconciliando al mundo consigo,
no teniendo en cuenta los pecados de los hombres, y confiándonos la palabra de la reconciliación.
Nosotros somos, entonces, embajadores de Cristo, y es Dios el que exhorta a los hombres por intermedio
nuestro. Por eso, les suplicamos en nombre de Cristo: déjense reconciliar con Dios. A Aquél que no
1
conoció el pecado, Dios lo identificó con el pecado en favor nuestro, a fin de que nosotros seamos
justificados por Él.
Palabra de Dios.
LECTIO DIVINA DEL PADRE MISERICORDIOSO
Tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida
1. ¿Qué dice el texto? (lectura)
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas 15, 1-3. 11-32
R/. Gloria a Ti, Señor.
1Todos los que cobraban impuestos para Roma y otra gente de mala fama se acercaban a Jesús, para
oírlo. 2Los fariseos y los maestros de la ley lo criticaban por esto, diciendo: - Este recibe a los pecadores
y come con ellos.
3Entonces Jesús les dijo esta parábola: 11 «Un hombre tenía dos hijos, 12y el más joven le dijo a su
padre: "Padre, dame la parte de la herencia que me toca". Entonces el padre repartió los bienes entre
ellos.
13Pocos días después el hijo menor vendió su parte de la propiedad, y con ese dinero se fue lejos, a otro
país, donde todo lo derrochó llevando una vida desenfrenada. 14Pero cuando ya se lo había gastado
todo, hubo una gran escasez de comida en aquel país, y él comenzó a pasar hambre. 15Fue a pedir
trabajo a un hombre del lugar, que lo mandó a sus campos a cuidar cerdos. 16Y tenía ganas de llenarse
con las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie se las daba. 17Al fin se puso a pensar: "¡Cuántos
trabajadores en la casa de mi padre tienen comida de sobra, mientras yo aquí me muero de hambre!
18Regresaré a casa de mi padre, y le diré: Padre mío, he pecado contra Dios y contra ti; 19ya no
merezco llamarme tu hijo; trátame como a uno de tus trabajadores". 20Así que se puso en camino y
regresó a la casa de su padre. Cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y sintió compasión de él.
Corrió a su encuentro, y lo recibió con abrazos y besos. 21El hijo le dijo: "Padre mío, he pecado contra
Dios y contra ti; ya no merezco llamarme tu hijo". 22Pero el padre ordenó a sus criados: «Saquen pronto
la mejor ropa y vístanlo; pónganle también un anillo en el dedo y sandalias en los pies. 23Traigan el
becerro más gordo y mátenlo. ¡Vamos a celebrar esto con un banquete! 24Porque este hijo mío estaba
muerto y ha vuelto a vivir; se había perdido y lo hemos encontrado». Comenzaron la fiesta. 25“Entre
tanto, el hijo mayor estaba en el campo. Cuando regresó y llegó cerca de la casa, oyó la música y el
baile. 26Entonces llamó a uno de los criados y le preguntó qué pasaba. 27El criado le dijo:
"Es que su hermano ha vuelto; y su padre ha mandado matar el becerro más gordo, porque lo recobró
sano y salvo".
28Pero tanto se enojó el hermano mayor, que no quería entrar, así que su padre tuvo que salir a rogarle
que lo hiciera. 29Le dijo a su padre:
"Tú sabes cuántos años te he servido, sin desobedecerte nunca, y jamás me has dado ni siquiera un
cabrito para tener una comida con mis amigos. 30En cambio, ahora llega este hijo tuyo, que ha
malgastado tu dinero con prostitutas, y matas para él el becerro más gordo".
31“El padre le contestó:
«Hijo mío, tú siempre estás conmigo, y todo lo que tengo es tuyo. 32Pero había que celebrar esto con un
banquete y alegrarnos, porque tu hermano, que estaba muerto, ha vuelto a vivir; se había perdido y lo
hemos encontrado».
Palabra del Señor.
R/. Gloria a Ti, Señor Jesús.
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EL PADRE MISERICORDIOSO -
CUADRO: "EL REGRESO DEL HIJO PRÓDIGO".
OBSERVEMOS LA ACTITUD DEL HIJO
MAYOR: El rostro del hermano mayor
aparece resignado, escéptico y juez. El hijo
mayor, correctamente ataviado, surge en el
cuadro desde la distancia. Como el Padre,
lleva barba y túnica roja, que, sin embargo,
está bastante más apagada. Le falta brillo y,
sobre todo, grandeza y dignidad.
Su presencia es rígida, erguida. Está
apoyado por un largo bastón, que lo hace
más grande, más lejano, más sombrío.
Su mirada es un tanto enigmática, con carga
y fuerza contenidas. Se mantiene a
distancia. Mira de reojo.
Sus pies y sus manos: Está de pie mientras
que el hermano menor está de rodillas y el
padre está agachado. Tiene las manos
cerradas, frente a las manos abiertas del
Padre y de su hermano.
- AUTOR DEL CUADRO:
El cuadro de Rembrandt Harmenszoom von Rijn.- Rembrandt, pintor holandés, es uno de los
principales autores de toda la historia de la pintura. Vive entre 1606 y 1669. Es el maestro del claroscuro
y uno de los más caracterizados pintores del barroco
2. ¿qué me (nos) dice el texto?
Actualicemos la parábola desde una confrontación de mi vida con el texto.
a) Relación del Hijo Mayor y el padre
El hijo mayor es una persona con un corazón frio, ha realizado las cosas como le ha parecido, no tiene
nada que perder, porque se encierra en su forma de ser, como quien dice aquellas personas que se
creen mejores que los demás juzgan, señalan… es el hijo mayor que no acepta que el hermano se vaya
de la casa, que se excluya de la relación con el padre, ahí no está el problema porque lo importante no es
quedarnos analizando la primera parte, las personas piensan que la primera impresión es la verdadera,
no dan oportunidad al cambio, ni a mejorar, muchas veces muchos como el hijo mayor pensamos que lo
que hemos realizado hasta hoy es lo púnico valido y verdadero.
b) Relación del hijo menor y el padre
El hijo menor es por su parte, una persona que desaprovecha su herencia, incluso la reclama antes de
tiempo, es el hijo que desaprovecha el tiempo, su fortuna, lo malgasta en cosas innecesarias, vicios,
borracheras, escándalos etc… pero se da cuenta a tiempo que su camino no es el que más le conviene,
empieza el cambio, la transformación de sentirse vacío, necesitado, sediento… tanto que desde su más
profunda necesidad de su hambre, sale ese grito desesperado: ¡tengo hambre!, hasta saciarse o untarse
de la misma comida que le dan a los cerdos (animal impuro en su contexto cultural), es lo que pasa a
diario, no valoramos lo que tenemos, no valoramos las personas, no valora, es joven, piensa que puede
malgastar, disfrutar, despilfarrar la plata, etc… ¿Qué hacer? ¿Cuál es la salida? Volver a la casa del
padre, miremos la actitud de pequeñez, se arrepiente, vienen los pasos del perdón:
- Reconocer la culpa, el pecado, su alejamiento de la casa paterna, en su lejaníave el valor de la
riqueza que abandonó.
-
Sentirse necesitado para volver a encontrarse con el padre
-
Tomar la iniciativa, ir hacia el padre, es el paso de apertura para el perdón.
-
Decir los pecados, expresar su arrepentimiento, no basta con saberlo, es importante expresarlo.
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- Humillarse, el pecado es humillante, pero más humillante estener que decirle al otro los pecados.
Ahí surge la gracia del perdón, recordemos que la palabra perdón, tiene su significado, per-don,
etimológicamente, viene del verbo latino donare (dar) con el prefijo per, para expresar el grado excesivo
de la acción del dar. el perdón significa dar en exceso. per: darse….en generosidad y completamente.
Esta forma de entender e perdón como dar en exceso está más en conexión con el verbo griego charit-
zomai (dar graciosamente, dar libremente, hacer un favor) que con la forma privativa del uso bíblico del
término aphiemi (desentenderse, poner en manos de otro, liberar, dejar ir, despedir).
- la reconciliación, del latín concilium, sugiere la necesidad de un proceso deliberativo, de
discernimiento participativo, para llegar a un acuerdo. la reconciliación subraya la dimensión socio -
comunitaria del perdón. el sacerdote representa la comunidad, a la Iglesia en el proceso sacramental.
MANOS DE MUJER: Dios es
madre, para acogerlo, son
suaves, tiernas, amorosas,
no señalan, no juzgan, sino
que acogen y perdonan (se
dan en exceso). En el perdón
hay un elemento de
gratuidad, más allá de la
equidad y de lo mesurado.
MANOS DE HOMBRE:
Dios padre, el padre
que siempre ha estado
ahí. dando seguridad,
es el amor el que
invita, acoge, abraza,
sostiene, despliega
toda la capacidad
humana y divina.
El hijo menor : La cara del hijo menor trasluce anonadamiento y petición de perdón. Es un rostro al que
sólo se le ve una faz, un tanto deforme, a modo del rostro de un feto. Es signo del regreso del hijo menor
al regazo del Padre-Madre.
El pelo rapado le priva de individualización, lo hace uno más -como en los cuarteles o campos de
concentración que cortan el pelo a todos por el igual-. El único signo de dignidad que le queda es una
espalda, que porta, atada, a la altura de la cintura. Es el testimonio de su origen, el único vínculo que le
queda a la casa paterna (pasado e historia).
Lleva las sandalias rotas, desgastadas. Ya no sirven. Con todo, el pie derecho va todavía más
desguarnecido. Las manos del Padre jugarán también un especial paralelismo con los pies desnudos de
su hijo menor, protegiendo, sanando, apoyando.
c) Relación del Padre que sale al encuentro del hijo menor
Dios sale a nuestro encuentro como un Padre lleno de misericordia. Acoger su amor entrañable nos abre
a la alabanza y a la acción de gracias, nos viste de fiesta. Cada uno de nosotros elevamos una oración
de reconocimiento de nuestro pecado y de actitud de conversión por habernos alejado de la casa del
Padre o por haber creído que no necesitamos de conversión y criticamos a aquellos que han caído en
pecado para que nos ayude a tener la gracia de volver a él y tener un corazón misericordioso:
« Misericordia, Señor, por tu bondad, por tu inmensa compasión borra mi culpa ».
3. ¿Qué me (nos) hace decir el texto?
Destacamos tres grandes mensajes ante la proximidad de la Semana Santa:
a) nuestro error al creer que lejos de Dios, lejos de la Casa del padre, encontraremos la felicidad...
b) el gran amor de Dios para con todos nosotros y su actitud de misericordia y perdón para quien
reconoce su pecado y quiere volver a casa...
c) la alegría del perdón que se recibe y la fiesta que se organiza cuando tomamos la decisión de decir:
«me levantaré y volveré a la casa de mi Padre».
Oro de acuerdo al tiempo de cuaresma
La Cuaresma es el momento oportuno para valorar estas realidades básicas de la vida cristiana, para
redescubrirlas: acoger el mensaje de la reconciliación y celebrar la misericordia divina, revisar la
participación en la Eucaristía como momento de alegría, de esperanza, de compromiso vital con el
camino de Cristo y de la Iglesia, en el servicio de reconciliación de los hombres.
Ejercicio de oración
Cierro los ojos y visualizo la palabra escuchada, me pongo en el papel del hijo que ha dejado la casa
paterna o el hijo mayor que no reconoce la misericordia del Padre, me pongo en la presencia de Dios.
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Me comprometo a hacer una buena confesión, a un cambio profundo en mi vida, a no condenar a los
demás, sino ayudarles a encontrar el camino de la reconciliación con el Padre de las misericordias
4.Contemplemos el texto (praxis en la vida)
1. ¿He tenido alguna vez en la vida una experiencia fuerte de Dios? ¿Qué ha supuesto para mí?
2. ¿ Vivo en mi comunidad descubriendo el gozo de aceptar a mis hermanas(os) y ser aceptado por
ellos(as); amar a mis hermanos(as) y ser amado por ellos(as); confiar en mis hermanos(as) y recibir
confianza de ellos(as)?
3. ¿Es realmente la fraternidad una fiesta para mí?
4. Cuando hago catequesis o hablo de Dios, ¿qué Dios estoy dando a los demás? El Dios que aprendo
en las clases de teología o el Dios que actúa en mi vida con misericordia?
Noticias parroquiales
1. Te invitamos al seminario-taller de SANACIÓN INTEGRAL con los padres Pedro
Fernández, Wilson Sossa, cjm, Miguel Ángel Soto, cjm
Días: 15, 16 y 17 de Marzo
Hora: 6:00 p.m. a 10:30 p.m.
Lugar: parroquia San Juan María Vianney.
Dirección: kra 8 N8N-264 barrio María Paz
Entrada libre
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UN ABREBOCAS:LA ENTRADA TRIUNFAL DE JESÚS
Unahermosa y gratificante experiencia es meditar la palabra de DIOS en toda
su extensión, por eso hoy quiero invitarte a que abras tu mente y tu corazón
aprovechando esta época de reconciliación y preparación para la semana mayor
medites en la vida, pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor
JESUCRISTO.
JESÚS desde el primer milagro que realizó en las bodas de Caná comenzó con un
trasegar lleno de vivencias, milagros, evangelización, sanación y conversión,
entre otras que fueron tocando el corazón de muchas personas que lo siguieron
con fe y esperanza, otros por el contrario lo criticaron y cerraron su corazón a
su amor y sabiduría por eso no lograron disfrutar de su hermosa presencia,
regalo infinito de DIOS nuestro Padre. Hoy te hago esta pregunta ¿estás
dispuesto aseguirloconfe esperanza, con plena confianza y a reconocerlo en toda
su
divinidad?
Meditemos Mateo 21, 8-9:la entrada de JESÚS a Jerusalén.
Y la multitud, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino; y
otros cortaban ramas de los árboles, y las tendían en el camino.
Y la gente que iba delante y la que iba detrás aclamaba, diciendo:
¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del
Señor! ¡Hosanna en las alturas!”.
Personalmente considero que la multitud reconoció a medias al SEÑOR como el
hijo de DIOS, lo acompañaron en su entrada triunfal al templo de su Padre,
hombres, mujeres y niños que tenían su esperanza en aquel que les daría la
libertad que tanto esperaban, lo aclamaron sin cesar pero esperaban a aquel que
guiara un ejército que los librará del yugo al que estaban sometidos, ¡que
equivocados estaban!, JESÚS venía a liberarlos de la muerte que causa el
pecado, a darnos vida eterna.
Por un momento con mucha humildad entra y vive este pasaje: estas caminando
al lado de JESÚS, lo alabas, bendices y glorificas, le demuestras todo tu amor y
agradecimiento, confías plenamente en su amor, su infinita bondad te ha
permitido reconocerlo, lo tienes a tu lado, ÉL está dispuesto a escucharte, solo
te pide que lo acompañes sin mirar atrás, te invita a que dejes todo tu pasado, te
envuelvas en su amor y a que busques refugio en su sagrado corazón que arde
de amor por ti. Eso si te convida a que arrojes todos los escombros de tu vida,
desperdicios que no te hacen para nada feliz, que limpies toda tu alma. Sonríe y
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mira dentro en el interior de tu corazón, con una voz firme, llena de seguridad
te dice que debesperdonarte a ti mismo, en ese instante llegan a tu mente
muchos sucesos del pasado que han marcado tu vida, muchas desilusiones,
desengaños que has tenido y que indirectamente han hecho mella en tu vida,
cicatrices que no han sanado, traiciones, situaciones difíciles y llenas de dolor
que no has podido superar, el Señor en ese momento tan íntimo y tan personal te
está permitiendo entrar en lo más profundo de tu vida, te revela secretos que
quizá creías que estaban bien ocultos o que habías olvidado, pero sabes una cosa
JESÚS te conoce muy bien y quiere liberarte, entonces sientes todo su amor y
misericordia, vuelve a sonreír tiernamente y te recuerda que te ama, de un
momento a otro te das cuenta que tu corazón llora, algunas lágrimas caen sobre
tus mejillas, te ofrece su mano, te abraza y te bendice, recoge todo tu pasado,
tus tristezas y sufrimientos, su ESPÍRITU te arrasa con tal fuerza que doblega
tus piernas, la sanación ha llegado a tu vida, has vuelto a nacer, a partir de hoy tu
vida cambiará para gloria de DIOS.
Después de este momento de sanación interior, te sientes aliviado, libre, alegre,
entonces te abandonas totalmente su regazo, tu espíritu descansa, tu cuerpo
está más liviano, tu corazón se ensancha de emoción y lo único que te queda es
alabarlo y bendecirlo por todo lo que ha hecho en tu vida y por lo que está
haciendo en este momento por ti, decides decirle “SI” a su invitación, estás
convencido de hacer de tu cuerpo un templo sagrado donde habite su ESPÍRITU.
Has perdonado y te has perdonado a ti mismo, has sanado tu corazón.
Todos aquellos reproches que te amargaban, que te hacían infeliz van
desapareciendo a medida que JESÚS va tomando posesión de tu corazón,
vuelves a sonreír ya que estás descubriendo que con CRISTO y en CRISTO todo
lo puedes, tu espíritu se ha fortalecido, te has revestido de la fuerza de su
amor. Comienza una nueva etapa de tu vida, por eso debes estar dispuesto a
beber el cáliz de la pasión de JESÚS y todo lo que significa en tu vida, pero no
te preocupes DIOS está a tu lado y poco a poco irá haciendo su obra no solo en
ti, sino que también en todas las personas que están alrededor tuyo. ¡Mucho
ánimo y mucha fe, con amor todo lo puedes!
Ya entraste con JESÚS al templo, prepárate y vive con esperanza supasión. Si
vas al Santísimo y lo visitas con amor, podrás seguir meditando la hermosa
historia de nuestra salvación. Aquí no termina todo, simplemente este es un
abrebocas para prepararnos con entrega total para acompañar a nuestro
salvador camino al calvario. DIOS te bendiga… Giovanni
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