Palabra de Dios
para alimentar tu día
Fr. Nelson Medina F., O.P
Tiempo Ordinario, Año Impar,
Semana No. 11, Martes
-------------------------------------
Lecturas de la S. Biblia
Temas de las lecturas: Cristo se hizo pobre por vosotros * Alaba, alma mía, al
Señor. * Amad a vuestros enemigos
Textos para este día:
2 Corintios 8,1-9:
Queremos que conozcáis, hermanos, la gracia que Dios ha dado a las Iglesias de
Macedonia: En las pruebas y desgracias creció su alegría; y su pobreza extrema se
desbordó en un derroche de generosidad. Con todas sus fuerzas y aún por encima
de sus fuerzas, os lo aseguro, con toda espontaneidad e insistencia nos pidieron
como un favor que aceptara su aportación en la colecta a favor de los santos. Y
dieron más de lo que esperábamos: se dieron a sí mismos, primero al Señor y
luego, como Dios quería, también a nosotros.
En vista de eso, como fue Tito quien empezó la cosa, le hemos pedido que dé el
último toque entre vosotros a esta obra de caridad. Ya que sobresalís en todo: en la
fe, en la palabra, en el conocimiento, en el empeño y en el cariño que nos tenéis;
distinguíos también ahora por vuestra generosidad. No es que os lo mande; os
hablo del empeño que ponen otros para comprobar si vuestro amor es genuino.
Porque ya sabéis lo generoso que fue nuestro Señor Jesucristo: siendo rico, se hizo
pobre por vosotros, para enriqueceros con su pobreza.
Salmo 145:
Alabaré al Señor mientras viva, / tañeré para mi Dios mientras exista. R.
Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob, / el que espera en el Señor, su Dios, / que
hizo el cielo y la tierra, / el mar y cuanto hay en él; / que mantiene su fidelidad
perpetuamente. R.
Que hace justicia a los oprimidos, / que da pan a los hambrientos. El Señor liberta a
los cautivos. R.
El Señor abre los ojos al ciego, / el Señor endereza a los que ya se doblan, / el
Señor ama a los justos. / El Señor guarda a los peregrinos. R.
Mateo 5,43-48: Cristo se hizo pobre por vosotros * Alaba, alma mía, al Señor. *
Amad a vuestros enemigos
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Habéis oído que se dijo: "Amarás a tu
prójimo" y aborrecerás a tu enemigo. Yo, en cambio, os digo: Amad a vuestros
enemigos, y rezad por los que os persiguen. Así seréis hijos de vuestro Padre que
está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a
justos e injustos. Porque, si amáis a los os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen
lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué
hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed
perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto."
Homilía
Temas de las lecturas: Cristo se hizo pobre por vosotros * Alaba, alma mía, al
Señor. * Amad a vuestros enemigos
1. Razones para una colecta
1.1 Uno de los varios objetivos que Pablo tenía en la que nosotros llamamos
"Segunda Carta a los Corintios" es motivar a estos fieles cristianos a mostrar su
solidaridad económica a través de un proyecto grande: una colecta para apoyar a
los cristianos de Palestina.
1.2 Pablo amó mucho ese proyecto, según podemos entender de sus escritos, y ello
seguramente se debía a que veía en él algo más que una recolección y distribución
de limosnas. La manera como hace propaganda a la idea y el espacio que le dedica
en sus epístolas indica que, aunque sus destinatarios no lo tuviesen quizá tan claro,
él sí sabía que no era asunto sólo de dineros.
1.3 Esta gran colecta era entre otras cosas un signo visible de unidad. Y esto, ya
hermoso en sí mismo, se hacía más significativo por una circunstancia: se trataba
de la unidad entre los convertidos del judaísmo y los convertidos del paganismo.
Cuando uno ha conocido un poco los niveles descomunales de prejuicio y mutuo
desprecio que durante siglos se habían levantado entre judíos y paganos, no puede
sino admirar el proyecto del apóstol. Se trataba ni más ni menos que de aprender a
dar signos claros de presencia solidaria y de apoyo generoso, allí donde antes sólo
habían germinado el odio, la ironía y el resentimiento.
1.4 Y es interesante también ver cómo argumenta Pablo su petición. Ante todo,
quiere que los fieles sean conscientes para descubrir el bien recibido. Sin
humillarlos les recuerda los tesoros que han llegado a sus vidas por el ministerio del
Evangelio, porque sabe que sólo puede dar el que ha recibido.
1.5 Toda esta escena de vida cristiana del siglo I es un manantial de enseñanzas
aplicables a nuestra vida, dos mil años después. En todo esto aprendemos que el
amor debe dar señales, que las comunidades de creyentes deben apoyarse y que
toda contribución verdadera y generosa nace de descubrir cuánto nos ha
enriquecido el amor de Dios en Cristo Jesús.
2. Amar a los que no nos aman
2.1 Si uno medita en el misterio de la gracia pronto descubre dos cosas: que es
deleitable recibirla pero parece imposible comunicarla. Quiero decir: es hermoso
sentirse uno amado sin merecerlo pero es difícil amar a alguien si creemos que no
se lo merece.
2.2 El evangelio de hoy en cierto modo nos enfrenta con esa paradoja de nuestro
comportamiento: queremos gracia pero nos cuesta "ser" gracia.
2.3 Éramos enemigos de Dios por nuestras rebeldías y pecados, pero no por ello
Dios dejó de amarnos ni de buscar nuestro bien. Ahora, que hemos sido amados y
redimidos, viene la pregunta: ¿estamos dispuestos a amar y buscar el bien de los
que se portan como enemigos nuestros? ¿Vamos, sí o no, a manifestar de qué amor
hemos nacido?