Palabra de Dios
para alimentar tu día
Fr. Nelson Medina F., O.P
Tiempo Ordinario, Año Impar,
Semana No. 21, Miércoles
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Lecturas de la S. Biblia
Temas de las lecturas: Trabajando día y noche, proclamamos entre vosotros el
Evangelio de Dios * Señor, tú me sondeas y me conoces. * Sois hijos de los que
asesinaron a los profetas
Textos para este día:
1Tesalonicenses 2,9-13:
Recordad, hermanos, nuestros esfuerzos y fatigas; trabajando día y noche para no
serle gravoso a nadie, proclamamos entre vosotros el Evangelio de Dios. Vosotros
sois testigos, y Dios también, de lo leal, recto e irreprochable que fue nuestro
proceder con vosotros, los creyentes; sabéis perfectamente que tratamos con cada
uno de vosotros personalmente, como un padre con sus hijos, animándoos con tono
suave y enérgico a vivir como se merece Dios, que os ha llamado a su reino y
gloria. Ésta es la razón por la que no cesamos de dar gracias a Dios, porque al
recibir la palabra de Dios, que os predicamos, la acogisteis no como palabra de
hombre, sino, cual es en verdad, como palabra de Dios, que permanece operante
en vosotros, los creyentes.
Salmo 138:
¿Adónde iré lejos de tu aliento, / adónde escaparé de tu mirada? / Si escalo el cielo,
allí estás tú; / si me acuesto en el abismo, allí te encuentro. R.
Si vuelo hasta el margen de la aurora, / si emigro hasta el confín del mar, / allí me
alcanzará tu izquierda, / me agarrará tu derecha. R.
Si digo: "Que al menos la tiniebla me encubra, / que la luz se haga noche en torno
a mí", / ni la tiniebla es oscura parapara ti, / la noche es clara como el día. R
Mateo 23,27-32:
En aquel tiempo, habló Jesús diciendo: "¡Ay de vosotros, escribas y fariseos
hipócritas, que os parecéis a los sepulcros encalados! Por fuera tienen buena
apariencia, pero por dentro están llenos de huesos y podredumbre; lo mismo
vosotros: por fuera parecéis justos, pero por dentro estáis repletos de hipocresía y
crímenes. ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que edificáis sepulcros a
los profetas y ornamentáis los mausoleos de los justos, diciendo: "Si hubiéramos
vivido en tiempo de nuestros padres, no habríamos sido cómplices suyos en el
asesinato de los profetas"! Con esto atestiguáis en contra vuestra, que sois hijos de
los que asesinaron a los profetas. ¡Colmad también vosotros la medida de vuestros
padres!"
Homilía
Temas de las lecturas: Trabajando día y noche, proclamamos entre vosotros el
Evangelio de Dios * Señor, tú me sondeas y me conoces. * Sois hijos de los que
asesinaron a los profetas
1. Aceptar a Dios oyendo a un hombre
1.1 Si me preguntaran cuál es la maravilla más grande del mundo, yo diría:
"aceptar a Dios oyendo a un hombre". Y eso es exactamente lo que sucede en la
obra de la evangelización. A ello alude Pablo en la primera lectura de hoy.
1.2 Evangelizar es prestarle nuestra boca a Cristo de modo que sea instrumento
suyo, y así nuestras palabras, aunque dichas por humanos, sean en realidad
mensaje divino. Precisamente, lo grandioso del evangelizador es que logra, a
imagen de Cristo y por la gracia de Cristo, borrar el límite infinito que separa a Dios
y el hombre.
1.3 El paganismo llama a eso "magia>; pero nosotros sabemos que es "gracia".
Porque no depende de técnicas ni de palabras misteriosas, sino de ese único
misterio y hermosura que se llama FE.
2. La historia de la mentira
2.1 La verdad tiene su camino por esta tierra, pues es verdad que unas verdades
ayudan a descubrir otras. Pero también la mentira hace su propio y repugnante
camino, pues decir unas mentiras nos obliga a decir luego otras. El camino de la
mentira es objeto, en el evangelio de hoy, de dura reprensión por parte de
Jesucristo.
2.2 La mentira se vuelve forma de vida por los beneficios que trae. Vivir de
apariencias, por ejemplo, reporta el beneficio de ser alabado o rodearse de buena
fama. Ese bien, aunque sea falso y esté siempre en peligro de derrumbarse,
produce una costra de costumbre en el corazón.; una costra que no va a hacer por
sí sola, sino que necesita de un acto vigoroso, como el del bisturí. Por eso habla
Cristo como habla.