EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
Evangelio según San Lucas 5,1-11:
En una oportunidad, la multitud se amontonaba alrededor de Jesús para escuchar la
Palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret.
Desde allí vio dos barcas junto a la orilla del lago; los pescadores habían bajado y
estaban limpiando las redes.
Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y le pidió que se apartara un
poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba a la multitud desde la barca.
Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: "Navega mar adentro, y echen las redes".
Simón le respondió: "Maestro, hemos trabajado la noche entera y no hemos sacado
nada, pero si tú lo dices, echaré las redes".
Así lo hicieron, y sacaron tal cantidad de peces, que las redes estaban a punto de
romperse.
Entonces hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que fueran a
ayudarlos. Ellos acudieron, y llenaron tanto las dos barcas, que casi se hundían.
Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús y le dijo: "Aléjate de mí,
Señor, porque soy un pecador".
El temor se había apoderado de él y de los que lo acompañaban, por la cantidad de
peces que habían recogido;
y lo mismo les pasaba a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, compañeros de
Simón. Pero Jesús dijo a Simón: "No temas, de ahora en adelante serás pescador
de hombres".
Ellos atracaron las barcas a la orilla y, abandonándolo todo, lo siguieron.
Comentario del Evangelio por:
Papa Francisco
Homilía del 14/04/2013- Copyright © Libreria Editrice Vaticana
"Navega mar adentro, y echen las redes"
El anuncio de Pedro y de los Apóstoles no consiste sólo en palabras, sino que la
fidelidad a Cristo entra en su vida, que queda transformada, recibe una nueva
dirección, y es precisamente con su vida con la que dan testimonio de la fe y del
anuncio de Cristo… Pero esto vale para todos: el Evangelio ha de ser anunciado y
testimoniado. Cada uno debería preguntarse: ¿Cómo doy yo testimonio de Cristo
con mi fe? ¿Tengo el valor de Pedro y los otros Apóstoles de pensar, decidir y vivir
como cristiano, obedeciendo a Dios?
Es verdad que el testimonio de la fe tiene muchas formas, como en un gran
mural hay variedad de colores y de matices; pero todos son importantes, incluso
los que no destacan. En el gran designio de Dios, cada detalle es importante,
también el pequeño y humilde testimonio tuyo y mío, también ese escondido de
quien vive con sencillez su fe en lo cotidiano de las relaciones de familia, de
trabajo, de amistad. Hay santos del cada día, los santos «ocultos», una especie de
ᆱclase media de la santidadᄏ… de la que todos podemos formar parte.
Pero en diversas partes del mundo hay también quien sufre, como Pedro y los
Apóstoles, a causa del Evangelio; hay quien entrega la propia vida por permanecer
fiel a Cristo, con un testimonio marcado con el precio de su sangre. Recordémoslo
bien todos: no se puede anunciar el Evangelio de Jesús sin el testimonio concreto
de la vida. Quien nos escucha y nos ve, debe poder leer en nuestros actos eso
mismo que oye en nuestros labios, y dar gloria a Dios. Me viene ahora a la
memoria un consejo que San Francisco de Asís daba a sus hermanos: predicad el
Evangelio y, si fuese necesario, también con las palabras.
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”