EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
sábado 28 Septiembre 2013
Sábado de la vigésima quinta semana del tiempo ordinario
Libro de Zacarías 2,5-9.14-15a.
Yo levanté los ojos, y tuve una visión: Había un hombre que tenía en la mano una
cuerda de medir.
Entonces le pregunté: "¿A dónde vas?". El mes respondió: "Voy a medir Jerusalén,
para ver cuánto tiene de ancho y cuánto de largo".
Mientras el ángel que hablaba conmigo estaba allí, otro ángel le salió a su
encuentro
y le dijo: "Corre, habla a ese joven y dile: Jerusalén será una ciudad abierta por la
gran cantidad de hombres y animales que habrá en ella.
Yo seré para ella -oráculo del Señor- una muralla de fuego a su alrededor, y seré su
Gloria en medio de ella".
Grita de júbilo y alégrate, hija de Sión: porque yo vengo a habitar en medio de ti -
oráculo del Señor-.
Aquel día, muchas naciones se unirán al Señor: ellas serán un pueblo para él y
habitarán en medio de ti. ¡Así sabrás que me ha enviado a ti el Señor de los
ejércitos!
Libro de Jeremías 31,10.11-12ab.13.
Que todas las naciones escuchen la palabra de Yavé;
proclámenla en las islas lejanas:
«El que dispersó a Israel, lo reunirá
y lo cuidará como un pastor a su rebaño.»
Porque Yavé ha rescatado a Jacob
y lo ha librado de las manos del poderoso.
Vendrán, cantando de alegría, al cerro de Sión,
y acudirán para gozar de los regalos de Yavé,
del trigo, vino y aceite, de las ovejas y bueyes.
Su alma será como un huerto bien regado,
y no volverán más a estar desganados.
Entonces la muchacha bailará de alegría,
jóvenes y viejos vivirán felices;
cambiaré su tristeza en alegría, los consolaré,
los haré reír después de sus penas.
Evangelio según San Lucas 9,43b-45.
Todos estaban maravillados de la grandeza de Dios. Mientras todos se admiraban
por las cosas que hacía, Jesús dijo a sus discípulos:
"Escuchen bien esto que les digo: El Hijo del hombre va a ser entregado en manos
de los hombres".
Pero ellos no entendían estas palabras: su sentido les estaba velado de manera que
no podían comprenderlas, y temían interrogar a Jesús acerca de esto.
Comentario del Evangelio por :
Orígenes (c.185-253), presbítero, teólogo
Tratado de los Principios, II, 6,2 ; PG 11, 210
“Ellos no entendían estas palabras”
Entre las cosas sublimes y las maravillas que se pueden decir de Cristo hay una que
sobresale de todas las demás y excede absolutamente la capacidad de admiración
del hombre y la fragilidad de nuestra inteligencia mortal no es capaz de comprender
ni imaginar. Y es que la omnipotencia de la majestad divina, la Palabra misma del
Padre, la misma Sabiduría de Dios, por la que todas las cosas fueron creadas –lo
visible y lo invisible—(cf Col 1,16) se deja contener en los límites de este hombre
que se manifestó en Judea. Esta es nuestra fe. Pero todavía hay más. Creemos que
la sabiduría de Dios se ha encerrado en el seno de una mujer, que ha nacido entre
llantos y gemidos comunes a todos los recién nacidos. Y sabemos que después de
todo esto, Cristo ha conocido la angustia ante la muerte hasta el punto de
exclamar: “Siento una tristeza mortal.” (Mt 26,38) Fue arrastrado hacia una muerte
ignominiosa...aunque sabemos que el tercer día resucitó...
Realmente, dar a entender estas verdades a los oídos humanos, intentar
expresarlas con palabras, excede la capacidad del lenguaje humano... y
probablemente el de los ángeles.
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”