EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
Evangelio según San Lucas 17,5-10.
Los Apóstoles dijeron al Señor: "Auméntanos la fe".
El respondió: "Si ustedes tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, y dijeran
a esa morera que está ahí: 'Arráncate de raíz y plántate en el mar', ella les
obedecería.
Supongamos que uno de ustedes tiene un servidor para arar o cuidar el ganado.
Cuando este regresa del campo, ¿acaso le dirá: 'Ven pronto y siéntate a la mesa'?
¿No le dirá más bien: 'Prepárame la cena y recógete la túnica para servirme hasta
que yo haya comido y bebido, y tú comerás y beberás después'?
¿Deberá mostrarse agradecido con el servidor porque hizo lo que se le mandó?
Así también ustedes, cuando hayan hecho todo lo que se les mande, digan: 'Somos
simples servidores, no hemos hecho más que cumplir con nuestro deber'".
Comentario del Evangelio por :
Juan Pedro de Caussade (1675-1751), jesuita
La fe de los humildes servidores, de la humilde sirvienta
“Abandono a la Divina Providencia”, 2,30
Encontrar la bondad de Dios tanto en las cosas más pequeñas y ordinarias como en
las más grandes, es tener una fe nada común, sino grande y extraordinaria.
Contentarse con el momento presente es saborear y adorar la voluntad de Dios en
todo lo que hay que hacer y sufrir, en las cosas que por su sucesión constituyen el
momento presente. Las almas sencillas, gracias a su fe viva, adoran a Dios en los
momentos más humillantes; nada se esconde a su mirada de fe... Nada los
desconcierta ni les disgusta.
María verá huir a los apóstoles, ella permanecerá firme al pie de la cruz y
reconocerá a su Hijo desfigurado por las llagadas y los salivazos...La vida de fe no
es otra cosa que seguir a Dios a través de todos los disfraces que parecen
desfigurarlo, destruirlo, aniquilarlo. Esta es la vida de María que desde el establo
hasta el Calvario permanece fiel a un Dios que es desconocido por todo el mundo,
abandonado y perseguido. Del mismo modo, las almas de fe atraviesan una serie
de muertes, de velos de sombras y de apariencias que hacen la voluntad de Dios
irreconocible. Estas almas aman la voluntad de Dios hasta la muerte en cruz. Saben
que hay que dejar atrás las sombras y correr hacia el sol divino. Desde la salida del
sol hasta el ocaso, a pesar de las nubes oscuras y espesas que lo esconden, este
sol irradia, calienta y abrasa a las almas fieles .
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”