EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
Evangelio según San Lucas 19,41-44.
Cuando estuvo cerca y vio la ciudad, se puso a llorar por ella,
diciendo: "¡Si tú también hubieras comprendido en este día el mensaje de paz! Pero
ahora está oculto a tus ojos.
Vendrán días desastrosos para ti, en que tus enemigos te cercarán con
empalizadas, te sitiarán y te atacarán por todas partes.
Te arrasarán junto con tus hijos, que están dentro de ti, y no dejarán en ti piedra
sobre piedra, porque no has sabido reconocer el tiempo en que fuiste visitada por
Dios".
Comentario del Evangelio por
Pablo VI , papa de 1963-1978
Exhortación apostólica sobre la alegría cristiana « Gaudete in Domino »
«Desdichadamente, ésto está escondido a tus ojos »
Es del todo evidente que ninguna ciudad de aquí abajo constituye el término de
nuestro peregrinar en el tiempo. Dicho término está escondido en el más allá, en el
corazón del misterio de Dios que todavía es invisible para nosotros; porque nuestro
caminar es todavía en fe, no en la clara visión, y no se nos ha manifestado todavía
lo que seremos. La nueva Jerusalén, de la cual somos ya ciudadanos e hijos,
desciende de arriba, de junto a Dios. Todavía no hemos podido contemplar el
esplendor de esta única ciudad definitiva, más que como en un espejo, de manera
confusa, manteniendo firme la palabra de los profetas. Pero ya desde ahora somos
ciudadanos de ella, o estamos invitados a serlo; todo el peregrinar espiritual recibe
su sentido interior de este último destino.
Esta es la Jerusalén que han celebrado lo salmistas. El mismo Jesús, y María, su
madre, en esta tierra, han cantado los cánticos de Sión al subir a Jerusalén:
“Belleza perfecta, alegría de toda la tierra”. Pero desde ahora la Jerusalén de arriba
recibe todo su atractivo sólo de Cristo, es hacia él que hacemos un camino interior.
(Referencias bíblicas: 1Jn 3,2; Ga 4,26; Ap 21,2; 1Co 13,12; Sl 49,2; Sl 47,3)
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”