Palabra de Dios
para alimentar tu día
Fr. Nelson Medina F., O.P
jueves 13 Febrero 2014
Jueves de la quinta semana del tiempo ordinario
Primer Libro de los Reyes 11,4-13.
Así, en la vejez de Salomón, sus mujeres les desviaron el corazón hacia otros
dioses, y su corazón ya no perteneció íntegramente al Señor, su Dios, como el de
su padre David.
Salomón fue detrás de Astarté, la diosa de los sidonios, y detrás de Milcóm, el
abominable ídolo de los amonitas.
El hizo lo que es malo a los ojos del Señor, y no siguió plenamente al Señor, como
lo había hecho su padre David.
Fue entonces cuando Salomón erigió, sobre la montaña que está al este de
Jerusalén, un lugar alto dedicado a Quemós, el abominable ídolo de Moab, y a
Milcóm, el ídolo de los amonitas.
Y lo mismo hizo para todas sus mujeres extranjeras, que quemaban incienso y
ofrecían sacrificios a sus dioses.
El Señor se indignó contra Salomón, porque su corazón se había apartado de él, el
Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces
y le había prohibido ir detrás de otros dioses. Pero Salomón no observó lo que le
había mandado el Señor.
Entonces el Señor dijo a Salomón: "Porque has obrado así y no has observado mi
alianza ni los preceptos que yo te prescribí, voy a arrancarte el reino y se lo daré a
uno de tus servidores.
Sin embargo, no lo haré mientras tú vivas, por consideración a tu padre David: se
lo arrancaré de las manos a tu hijo.
Pero no le arrancaré todo el reino, sino que le daré a tu hijo una tribu, por
consideración a mi servidor David y a Jerusalén, la que yo elegí".
Salmo 106(105),3-4.35-36.37.40.
¡Felices los que respetan el derecho
y practican la justicia en todo tiempo!
Acuérdate de mí, Señor, tú que amas a tu pueblo,
que tu visita traiga tu salvación.
se mezclaron con los paganos
y aprendieron sus modos de comportarse.
Sirvieron a los ídolos,
que fueron una trampa para ellos;
sacrificaron sus hijos y
sus hijas a los demonios
La cólera del Señor se encendió contra su pueblo
y tuvo horror de su propia gente.
Evangelio según San Marcos 7,24-30:
Después Jesús partió de allí y fue a la región de Tiro. Entró en una casa y no quiso
que nadie lo supiera, pero no pudo permanecer oculto.
En seguida una mujer cuya hija estaba poseída por un espíritu impuro, oyó hablar
de él y fue a postrarse a sus pies.
Esta mujer, que era pagana y de origen sirofenicio, le pidió que expulsara de su
hija al demonio.
El le respondió: "Deja que antes se sacien los hijos; no está bien tomar el pan de
los hijos para tirárselo a los cachorros".
Pero ella le respondió: "Es verdad, Señor, pero los cachorros, debajo de la mesa,
comen las migajas que dejan caer los hijos".
Entonces él le dijo: "A causa de lo que has dicho, puedes irte: el demonio ha salido
de tu hija".
Ella regresó a su casa y encontró a la niña acostada en la cama y liberada del
demonio.
Comentario del Evangelio por :
Orígenes (c. 185-253), sacerdote y teólogo
Comentario al evangelio de Mateo, 9, 16; SC 16
"Jesús se fue a la región de Tiro"
Jesús salió de Israel: "Saliendo de allí, Jesús entró en la región de Tiro" (Mt 15,21),
nombre que quiere decir " la alianza de las naciones". Con el fin de que, entre la
gente de este territorio, los que creían pudieran ser salvados cuando salieran. En
efecto, presta atención a estas palabras: "Una mujer, una Cananea, venida de
estos territorios, empezó a gritar diciendo: ' ten piedad de mi, Señor, Hijo de
David; mi hija está atormentada por un demonio ' " (v. 22). A mi parecer, si no
hubiera salido de estos territorios, no habría podido acercarse a Jesús con estos
gritos que brotan "de una gran fe", como él mismo lo testimonió (v. 28).
"Según la proporción de nuestra fe " (Rm 12,6), salimos del territorio de las
naciones paganas… Ciertamente hay que creer que cada uno de nosotros, cuando
peca, se encuentra en el territorio de Tiro o de Sidón, o del Faraón y de Egipto, o
bien de cualquier país extranjero a la herencia de Dios. Pero cuando el pecador se
aleja del mal, volviendo al bien, sale de estos territorios donde ha reinado el pecado
y se apresura hacia los territorios que pertenecen a Dios…
Observa también este tipo de acrcamiento de Jesús hacia la mujer de Cananea; Ya
que parece dirigirse hacia la región de Tiro y de Sidón … Las personas justas están
destinadas al Reino de los cielos y a su ensalzamiento en el Reino de Dios, pero los
pecadores están destinados a la bajeza de su maldad …
La Cananea, dejando estos territorios, dejaba esta disposición al decaimiento, a la
maldad, cuando daba gritos y decía: "Ten piedad de mí, Señor, Hijo de David"...
Todas las curaciones que Jesús hizo, como los evangelistas las contaron, se
efectuaron entonces para que los que las vieran tuvieran fe. Pero estos
acontecimientos son sólo el símbolo de todo lo que sucede por el poder de Jesús,
porque no hay época donde lo que se escribe no se realiza, exactamente del mismo
modo.