Sábado 15 de Febrero de 2014
Santoral: Claudio, Fausto, Jovita
1Reyes 12,26-32; 13,33-34 Jeroboán hizo dos becerros de oro
Salmo responsorial: 105 Acuérdate de mí, Señor, por amor a tu pueblo.
Marcos 8,1-10 La gente comió hasta quedar satisfecha
Uno de aquellos días, como había mucha gente y no tenían qué comer, Jesús llamó
a sus discípulos y les dijo: Me da lástima de esta gente; llevan ya tres días conmigo
y no tienen qué comer, y, si los despido a sus casas en ayunas, se van a desmayar
por el camino. Además, algunos han venido desde lejos. Le replicaron sus
discípulos: ¿Y de dónde se puede sacar pan, aquí, en despoblado, para que se
queden satisfechos? Él les preguntó: ¿Cuántos panes tenéis? Ellos contestaron:
Siete. Mandó que la gente se sentara en el suelo, tomó los siete panes, pronunció la
acción de gracias, los partió y los fue dando a sus discípulos para que los sirvieran.
Ellos los sirvieron a la gente. Tenían también unos cuantos peces; Jesús los
bendijo, y mandó que los sirvieran también. La gente comió hasta quedar
satisfecha, y de los trozos que sobraron llenaron siete canastas; eran unos cuatro
mil. Jesús los despidió, luego se embarcó con sus discípulos y se fue a la región de
Dalmanuta.
Pensemos…
Todos necesitamos el pan y en estos días de tanta carestía y situaciones
muy duras de desabastecimiento la situación se hace cuesta arriba. Y si a esto le
agregamos el abuso de unos cuantos aprovechándose del momento para
acapararlos, venderlos a sobre precio y sacar la sangre a los más pobres. Todos e
complica. Pero en definitiva el pan sigue siendo el nuestro de cada día.
Entonces…
La gente anda detrás de Jesús, según el evangelio. Lo han visto hacer
milagros y ahora se encuentran a descampado, tarde del día, cansados y con
hambre. Jesús anima a sus discípulos a atenderlo. Pero el problema es que son
muchos. Como mucha es su poca fe.
Hay cosas que se deben hacer en el silencio de cada necesidad. Hacía falta
pan y les da pan. Les hacía falta salud y los sanó sin importarle que día fuera. Era la
necesidad y punto. Pero ese milagro pudo no ser entendido, porque muchos
siguieron detrás de Él por interés. Esa deseo del milagro, de la ayuda, del lograr sin
esforzare y de obtener en río revuelto ganancia de pescadores.
Bien lo dijo Jesús: no sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que
viene de Dios. No es el mero material lo que salva, sino hay algo más grande que
viendo siendo hacer la voluntad de mi Padre que está en los cielos. De ahí que la
campaña para esta Cuaresma esté centrada en los alimentos para que alcancen a
todos y a todos lleguen con justicia.
Por aquí se hacen largas colas para conseguir los artículos de primera
necesidad, pero mínimas colas para comulgar o recibir algún sacramento. Hay una
división muy marcada entre la vida y la fe. Un divorcio que se ensancha cada día
más porque hemos dejado a un lado el verdadero alimento y es la Eucaristía.
Señor que volvamos a nuestra infancia, nazcamos de nuevo y recibamos con
fe y devoción al divina Eucaristía para recibir esa fuerza que nos conducirá al
puerto seguro de tu amor y redención. Amén.
Padre Marcelo
@padrerivas
Eclesiástico 15,16-21 Dios nos invita a saber escoger entre fuego y agua; muerte y
vida… Los ojos de Dios ven las acciones, no mandó pecar al hombre, ni deja impunes a los
mentirosos.