XVI Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo A.
¿Cómo extirpar la corrupción?
Acabo de leer que se multiplica día a día la denuncia de la CORRUPCIÓN Y
EN LA MISMA INTENSIDAD CRECE LA CORRUPCIÓN…
Esta experiencia, que se refleja en la nota periodística, describe la realidad
argentina. Una vez la realidad le da la razón a Jesús. En su Evangelio nos
viene advirtiendo que lo que hace honesta (limpia) a una sociedad humana
depende del corazón de las personas que la componen y no del discurso o
del relato ideologizado. Jesús lo enseñó saliendo al paso a la concepción de
limpieza moral-religiosa en el mundo de su tiempo- Entre los judíos
contemporáneos de Jesús se había instalado como ley moral-religiosa que la
moralidad de la persona dependía de comer o abstenerse de ciertos
alimentos. Y Jesús con una hondura del mejor psicólogo y la claridad del
mejor profesor y la sencillez del mayor de los sabios, les sentencia a sus
seguidores y a sus detractores Lo que mancha al hombre no es lo que
come o bebe sino las motivaciones de su corazón…Por eso en otra escena
en la que Fariseos, amantes del dinero a tal punto que hasta la misma
religión la habían organizado teniendo en cuenta su propio enriquecimiento,
se reían y se burlaban de Jesús por condenar el afán de enriquecerse. Jesús
insiste que lo que hace bueno o malo al hombre son las motivaciones de su
corazón - Las enseñanzas de Jesús son claras y sencillas y vigentes para
todo el mundo.
“Ustedes - les dice a sus compatriotas, ustedes quieren pasar por hombres
de bien ante la gente, pero Dios conoce sus corazones porque en realidad lo
que parece valioso para los hombres es despreciable para Dios” 1
Yo les digo a mis hermanas y hermanos argentinos: la corrupción no se
extirpa en el cuerpo social con simples medidas a nivel social político, por
rigurosas que fueren. Y menos por la fuerza. La corrupción es de tal poder
que intenta corromper a los mismos que la combaten. Y no pocas veces lo
logran. Todos conocemos algún caso…
No olvidemos…, la corrupción anida en el corazón del ser humano y usa las
motivaciones más intimas del corazón para corromper. Esa su fuerza
humana para extenderse como mancha de aceite en la sociedad… Por eso
Jesús liberador busca el corazón de cada persona humana para hacer
posible su reinado liberador del amor del mundo de los hombres. Busca la
conversión de cada persona al reinado de la Verdad- de la Justicia, del
amor. Desde cada persona se enciende fuego del amor que El vino a traer
a la tierra. Como el fuego se extiende a un bosque desde una rama
encendida la sociedad humana se libera de la corrupción solamente cuando
aparece un corazón liberado y encendido en motivaciones honestas , justas
y solidarias encendido en el amor a Dios proyectado en el amor al
prójimo…al otro…a los demás. Por eso, si cada argentino se dice a si mismo
si no yo ¿Quién? Si no es ahora ¿cuándo? Si no es, en lo que hago y vivo
¿Dónde? …bien pronto la corrupción será noticia de otra época y nuestra
1 Lucas 16, 15
Patria vivirá en la felicidad de familia argentina y volveremos a ser Patria
de hermanos…dando al mundo entero el testimonio de una sociedad limpia
y sana…
Los cristianos por ser cristianos hemos de recuperar nuestro puesto de
vanguardia en extirpar la corrupción en la sociedad argentina. Escuchemos
al primer Papa Pedro que nos exhorta a no corromper la fe cristiana
separándola de la vida cotidiana y dar testimonio de coherencia con lo que
profesamos con los labios: “Pongan todo su empeño en unir a su fe
una vida honrada, a la vida honrada… el dominio de sí mismo… la
religiosidad sincera… el aprecio fraterno, el amor” 2
Miguel
Esteban
Hesayne – Obispo
mehm@fibertel.com.ar
2 2 Carta San Pedro. 1,4