14 de Mayo. San
Matías: Jn 15, 9-17
En este día
En la primera lectura de
este día se nos cuenta según los “hechos de los apóstoles” cómo los Once se
reunieron, como se lo había dicho Jesús, en torno a María y con otros
discípulos a orar y esperar la venida del Espíritu Santo. Sentían que iba a
comenzar la vivencia del nuevo pueblo de Dios. Eran hebreos y para ellos era
muy importante el número doce, que había escogido Jesús. Entonces san Pedro,
que se sentía un poco responsable, propone que debían escoger a uno, que se
agregase a ellos en sustitución del traidor. Se dan cuenta que quien tiene que
escoger y llamar debe ser el mismo Jesús. Por eso echan a suerte entre dos. Era
una manera normal, cuando las dos partes eran buenas, de conocer la voluntad de
Dios. También entre los sacerdotes se echaba a suerte para entrar en el
Santuario del templo.
Pusieron condiciones. Quien
fuese agregado a los apóstoles debía haber conocido a Jesús desde el comienzo
de su predicación, debía tener conocimiento de su doctrina y tener un gran amor
y entrega a la causa de Jesús. Esto lo cumplían perfectamente dos hombres.
Ahora debía venir la elección por parte de Dios. Por eso se pusieron en oración
y echaron a suerte. El escogido fue Matías, cuyo nombre significa “regalo de
Dios”. Desde ese momento formó parte del grupo apostólico y como todos los
demás recibió la luz y la fuerza del Espíritu Santo el día de Pentecostés.
Prácticamente no conocemos
más sobre san Matías. Si siguió a Jesús desde el comienzo de su predicación
tendría que pertenecer a los 72 discípulos que Jesús en una ocasión mandó a
predicar por los pueblos y aldeas cercanos. Con esto se fue entrenando para su
posterior predicación. Como la mayoría de los apóstoles comenzaría
en Judea; pero tradiciones antiguas le sitúan predicando por Capadocia y las
costas del mar Caspio, por donde dicen algunos que murió crucificado. Hay otra
tradición antigua que le sitúa de vuelta en Judea donde es calumniado y
condenado por el sumo sacerdote a ser apedreado. Al final sería decapitado con
un hacha.
Se le tiene como un apóstol
algo más desconocido y que poco figura. Esto es una gran lección para nuestra
vida. Dios no mira la brillantez en este mundo, ni siquiera en cuanto al
apostolado. Para Dios lo que vale es el amor. Esta es una idea importante en el
evangelio que nos pone hoy
El primero y principal
mandamiento es el amor, porque Dios primeramente nos ha amado. Por eso nuestro
amor debe ser amplio y universal. Pero además Dios nos ha elegido “antes de la
creación del mundo” para que demos fruto. En este día de san Matías estas
palabras del evangelio sobre la elección tienen un realce especial. Dios nos
elige a todos para que “demos fruto”. Claro que este fruto la mayor parte de
las veces no lo vemos. Lo que sí sabemos es que el fruto depende sobre todo de
la unión que tengamos con Dios. Jesús nos habló de las ramas unidas o separadas
del tronco del árbol. Sólo fructificarán las que estén unidas al tronco.
La fiesta de los diferentes
apóstoles