PP. Carmelitas

Viña del Mar

 

              LECTIO DEL CUARTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

                                    (Año Impar. Ciclo C)

                 

Lecturas bíblicas:

Abrimos nuestra Biblia y buscamos:

a.- Jr.1, 4-5.17-19: Te nombré profeta de las naciones.

b.- 1Cor. 12,31-13,13: Queda la fe la esperanza, el amor, pero la más grande es el amor.

c.- Lc.4, 21-30: Jesús, como Elías y Eliseo, es enviado no sólo a los judíos.

Esquema

1.- Invocación al Espíritu Santo para que sea ÉL quien ore en nosotros: Ven Espíritu Santo…

2.- Acto Penitencial: Pedimos perdón al Señor, antes de escuchar su Palabra, de todo lo que nos ha impedido orar durante esta semana. Perdón Señor….

3.- Oración colecta: Señor, concédenos amarte con todo el corazón y que nuestro amor se extienda también a todos los hombres. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.

4.- Lectio divina:

a.- ¿Qué dice el texto? Leemos el Evangelio del próximo domingo.

- “Admiraban las palabras de gracia que salían de su boca” (Lc. 4,22ss).

El evangelio es la visita de Jesús a la Sinagoga de Nazaret, la tercera visita de Jesús a su pueblo, propia de Lucas (cfr. Mt.4,12-17.23; 13,53-58; Mc.1,15-15.19; 6,1-6). Sus contemporáneos no aceptan haberlo conocido desde su infancia, no superan el hecho que Dios se encarnara para ser hombre. El hijo de María, ¿es el Mesías? Él asume ser el Ungido por el Espíritu y el liberador del hombre por sus acciones con los pobres y oprimidos (cfr. Is. 61,1-2). Sin embargo, Jesús es rechazado por los suyos, porque conocen su origen. Para los judíos el Mesías vendría en su forma externa, glorioso y fuerte, como lo había descrito el profeta (cfr. Dn.7,9-14). Jesús desconcierta, puesto que procede de la tierra, lo conocen, se escandalizan por su sabiduría y por su estilo cercano y humilde de proponer el evangelio. La desconfianza nace de su origen humilde: “¿No es éste el  hijo de José?” (v.22). Los nazarenos exigen a  Jesús, un signo si de verdad es el Mesías. Dios acepta o se inclina sólo ante las  exigencias nacidas de una obediencia de fe, es decir, con un sí la disposición de  aceptar su divina voluntad, en cambio,  los nazarenos no creen, no tienen fe en Jesús (cfr. Mc.  6,6). Quieren milagros como los hechos en Cafarnaúm. Ahí se cumplía aquello de: “Os aseguro que ningún profeta es bien mirado  en su tierra” (v. 24), un médico que no se cura a  sí mismo pierde prestigio y la fe depositada en él. Los nazarenos juzgan a Jesús con  criterios puramente humanos, desconocen a Jesús, obra como profeta por encargo  de Dios.

- “Os digo de verdad: Muchas viudas había en Israel en los días de Elías,… Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo,…” (Lc.4, 25ss).

Se produce un cambio de ambiente, cuando cita el ejemplo de Elías y Eliseo, los que no habían venido, como ÉL, sólo para los judíos. Tampoco Elías (cfr. 1Re.17,  8-16)  y Eliseo encontraron fe en las gentes de su tiempo, (cfr. 2 Re.5,14), aquí sucederá lo mismo, el Mesías no ha sido escuchado por los suyos (Mc. 4, 24), por lo mismo, ha venido a ofrecer la salvación a los gentiles. No obra el profeta por propia voluntad sino por disposición de Dios que lo ha enviado. Dios conserva su libertad  en la distribución de sus bienes. Los nazarenos, no tienen derecho  a formular  exigencias de salvación, soberanía que Jesús proclama, salva a los hombres por  pura gracia. Esto provocó ciertamente las iras de sus paisanos en la sinagoga de  Nazaret. Cambiarles la mentalidad abriendo nuevos horizontes de la  acción de Dios a los judíos era tarea difícil: para ellos, el Dios de Israel, era sólo  judío y para los judíos; las naciones, por ser paganas e idólatras, quedaban  excluidas de su acción. Jesús es Salvador, resucita en Naím, al hijo de una viuda y libra de la  lepra a un samaritano (cfr. Lc.7, 11s; 17,12s). Jesús comenzó a predicar la  salvación a los judíos pero como lo rechazan, se dirige a los gentiles (cfr. Hch.13,  46s). Como los grandes profetas, Jesús reanuda sus grandes acciones, poderoso en  obras y palabras ante Dios y los hombres (cfr. Lc. 24,19). Dios visitó a su pueblo  por medio de los profetas, ahora lo hace por medio de Jesús.  Los nazarenos, lo condenan como blasfemo y deciden lapidarlo. Toda la asamblea se  convierte en juez de Jesús, quieren ejecutar la sentencia inmediatamente, lo  empujan hacia la altura para despeñarlo, expulsado de la comunidad, entregado a  la muerte, decide escapar de la ira de los suyos (v.30). Nadie pone las manos sobre  ÉL; no ha llegado su hora, sólo el Padre dispone de su vida y de su muerte. Nada  impedirá que resucite y vuelva al Padre para seguir su intercesión ante Dios por los  hombres. Jesús abandona definitivamente Nazaret, e irá a los gentiles para  comenzar las grandes obras de Dios; hasta de las piedras puede Dios sacar hijos. 

b.-  Meditación. ¿Qué me dice?  ¿Qué palabra o hecho de este evangelio me habla al corazón? Escoge tu texto o versículo y da razón de tu elección.

- “Estaban admirados de las palabras llenas de gracia que salían de su boca” (v. 22). De la admiración debemos pasar al compromiso escuchando lo que Jesús nos enseña y luego poniéndolo en práctica.

- “Fue enviado Elías a una viuda de Sarepta… en tiempos de Eliseo… fue purificado Naamán el sirio” (v.27). La salvación de Dios que proclama Jesús es para todos los que la quieran recibir, más allá de la nacionalidad.

- “Pero él pasando en medio de ellos, se marchó” (v.30). Los dejó por su falta de fe, pero no pudieron hacerle nada. Rechazar a Jesús es perder la oportunidad de la salvación. 

- Otros testimonios…

c.- Oración. ¿Qué le digo al Señor Jesús a propósito de este texto? Escoge una palabra con la que inicias tu oración personal.

- “Estaban admirados de las palabras llenas de gracia que salían de su boca” (v. 22). Que no perdamos Señor la admiración por tu persona, tus palabras, pero sobre todo de la salvación misericordiosa que tienes con cada uno de nosotros. Te lo pedimos Señor.

- “Pero él pasando en medio de ellos, se marchó” (v.30). Que nunca te dejemos pasar por nuestra vida sin reconocerte por tu palabra y los signos que realizas en nuestras vidas, te lo pedimos Señor.

- Otras oraciones…

d.- Contemplación y acción. ¿A qué me compromete este evangelio?

- Me comprometo a creer y obrar cada día según tu palabra de vida nueva.

5.- Relectura bíblica que hace S. Teresa de Jesús de este pasaje evangélico: Teresa de Jesús, supo lo que son los trabajos que  tuvo que padecer para llevar a cabo su Reforma del Carmelo por toda España. Como Jesús, padeció persecuciones, habladurías en contra de su persona y su obra. “Ya habéis visto, hijas, que se han pasado algunos trabajos, aunque creo son los menos los que he escrito; porque si se hubieran de decir por menudo, era gran cansancio, así de los caminos, con aguas y nieves y con perderlos, y sobre todo muchas veces con tan poca salud, que alguna me acaeció -no sé si lo he dicho- que era en la primera jornada que salimos de Malagón para Beas, que iba con calentura y tantos males juntos, que me acaeció, mirando lo que tenía por andar y viéndome así, acordarme de nuestro Padre Elías, cuando iba huyendo de Jezabel y decir: «Señor, ¿cómo tengo yo de poder sufrir esto? ¡Miradlo Vos!» Verdad es que, como Su Majestad me vio tan flaca, repentinamente me quitó la calentura y el mal. En teniendo salud, con alegría pasaba los trabajos corporales.” (F 27,17).

6.- Alabanza y Adoración. Te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre, por tu Hijo, única Palabra que da vida, te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre, desde tu Iglesia que espera todo de tu infinita misericordia, te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre, desde todos que celebran tu Palabra de vida y salvación, desde ellos y con ellos te alabamos Señor. 

- Otras alabanzas…

7.- Preces: Te lo pedimos Señor.

- Te pedimos Padre, por la Iglesia, para que la conversión de todos sus hijos sea una constante realidad, te lo pedimos Señor.

- Te pedimos Padre, por la paz, los emigrantes que buscan mejores condiciones de vida, los enfermos, te lo pedimos Señor.

-Te pedimos Padre, los que están de vacaciones estivales en esta lado del mundo para descansen, sin dejar su vida de fe, te lo pedimos Señor. 

- Otras preces…

8.- Padre Nuestro

9.- Abrazo de la paz

10.- Bendición final.

“Buscad leyendo y hallaréis meditando; llamad orando y abriros contemplando” (S. Juan de la Cruz).

Página Web: www. carmelitasvina.cl

P. Julio González C.

Pastoral de Espiritualidad Carmelitana