CICLO A
1. Idea teológica del Año Litúrgico “A”
El acento principal, del Año Litúrgico “A”, le viene del Evangelio de San
Mateo, que se lee durante todo este año. Este Evangelio fue escrito hacia el año 80
d. C. Nos ofrece una teología de impronta marcadamente judeo-cristiana, que se
alía con una predicación acentuadamente pagano-cristiana. Presupone ya en acto la
separación de la Iglesia del Judaísmo. Se advierte una relación de tensión existente
entre el filón tradicional judeo-cristiano por un lado, y el trabajo redaccional
acentuadamente pagano-cristiano por el otro.
2. La figura de Cristo en el Evangelio de san Mateo
Para Mateo Jesús es el Mesías esperado por Israel; es el Mesías davídico,
como aparece especialmente en el Evangelio de la Infancia. Actualiza las
esperanzas de Israel de manera inaudita (Mt 9, 3), y trae la salvación a Israel y a
los Gentiles (Mt 12, 18ss). Sin embargo, para Mt el Mesías es el rey de la paz sin
violencia. Este rasgo de la mansedumbre y de la paz resalta todavía más
relacionando al Mesías con la idea del “Siervo de Dios” que no rompe la caña y es el
Salvador misericordioso (Mt 12, 18ss: Is 42,1-4). La revelación de Jesús se
manifiesta bajo forma de humildad, y va destinada a los pobres y a los pequeños
(Mt 10, 42; 18, 6. 11). Los seguidores del Mesías han de ser también mansos y
humildes (Mt 11, 29).
El Mesías es presentado por Mt como el “nuevo Moisés” (Mt 2; 4, 2ss: Ex 34,
28; Dt 9, 9. 18). En el Sermón de la Montaña (Mt 5-7), Jesús es presentado como
Moisés subiendo a la montaña y dando la nueva Ley del Reino de Dios. De este
modo, la tipología de Moisés ilumina la grandeza, la trascendencia, la misión y la
función del Mesías cristiano.
Mateo presenta a Jesús sabiendo que es el enviado de Dios con plenos
poderes (Mt 10, 40ss). Para su comunidad representa la autoridad absoluta (Mt 23,
8. 10). El título de “Kyrios”: “Señor”, común en las comunidades helenísticas, es
frecuentemente anticipado por Mt a la vida terrena de Jesús.
En Mt, el título “Hijo de Dios” adquiere ya el sentido plena-mente cristiano, y
nos indica una máxima intimidad personal y exclusiva con el Padre (Mt 11, 27). Se
trata de una comunión personal estrechísima, de intercambio de conocimiento
amoroso. El “conocimiento del Padre” que sólo el Hijo puede revelar, significa para
los que lo reciben, “los sencillos”, la salvación.
3. La figura de la Iglesia en Mateo
En Mt la figura de Cristo y la de la Iglesia están estrechamente unidas entre
sí. En Mt tiene mucha importancia la Iglesia. Mt afirma una triple presencia de
Cristo en la Iglesia peregrinante:
1) presencia eucarística (Mt 26, 26ss);
2) presencia espiritual, mediante su perenne asistencia (Mt 18, 20; 28, 20);
3) presencia mediante su identificación con el prójimo, con el pequeño y el
enfermo (Mt 25, 31-46).
Padre Félix Castro Morales
Fuente: http://parroquiadelasoledad.org/ (Con permiso a homiletica.org)