EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
Evangelio según San Marcos 1,1-8.
Comienzo de la Buena Noticia de Jesús, Mesías, Hijo de Dios.
Como está escrito en el libro del profeta Isaías: Mira, yo envío a mi mensajero
delante de ti para prepararte el camino.
Una voz grita en el desierto: Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos,
así se presentó Juan el Bautista en el desierto, proclamando un bautismo de
conversión para el perdón de los pecados.
Toda la gente de Judea y todos los habitantes de Jerusalén acudían a él, y se
hacían bautizar en las aguas del Jordán, confesando sus pecados.
Juan estaba vestido con una piel de camello y un cinturón de cuero, y se
alimentaba con langostas y miel silvestre. Y predicaba, diciendo:
"Detrás de mí vendrá el que es más poderoso que yo, y yo ni siquiera soy digno de
ponerme a sus pies para desatar la correa de sus sandalias.
Yo los he bautizado a ustedes con agua, pero él los bautizará con el Espíritu Santo".
Comentario del Evangelio por
Homilía atribuida a san Gregorio Taumaturgo (v. 213 – v. 270), obispo
Homilía sobre la santa Teofanía, 4; PG 10, 1181
«No soy digno de desatarle las sandalias»
[Jesús fue a Juan para que lo bautizara. Juan dijo: ¡soy yo quien tengo que
ser bautizado por ti! (Mt 3,3.14).] En tu presencia, Señor, no me puedo callar,
porque «yo soy la voz, y la voz del que clama en el desierto: preparad el camino
del Señor. Soy yo el que necesita que tú me bautices, ¿y tú vienes a mí?» (Mt
3,3.14).
En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba junto a Dios y el Verbo era
Dios (Juan 1,1) ; eres el reflejo resplandeciente de la gloria del Padre, la expresión
perfecta del Padre(He 1,3); eres la verdadera luz que ilumina el mundo(Jn 1,9); tú
que aunque estabas en el mundo, viniste donde ya estabas; tú que te hiciste carne,
pero que habitas en nosotros(Jn 1,14; 14,23) y que te mostraste a tus siervos en
condición de siervo(Fil 2,7); tú que uniste la tierra y el cielo con tu santo nombre
como puente; ¿Eres tú quien vienes a mi?¿Tú que eres tan poderoso en
comparación a mi pobreza? El rey hacia el servidor, el Señor hacia el servidor...
"Yo sé cuál es el abismo entre la tierra y el Creador». Cuál la diferencia entre
el barro de la tierra y el que la ha modelado (Gen 2,7). Yo sé que tú eres el sol de
justicia mayor que yo, que soy la lámpara de tu gracia (Mt 3,20 y Jn 5,35). Y
mientras estás cubierto por la nube de tu cuerpo puro, yo, sin embargo, reconozco
mi condición de siervo, que proclama tu gloria. "Yo no soy digno de desatar la
correa de tus sandalias." ¿Y cómo me atrevo a tocar tu cabeza? Cómo extenderé la
mano sobre ti, »que has extendido los cielos como una tienda de campaña" y que
has afianzado «las aguas sobre la tierra" (Salmo 103,2, 135,6) ... ¿Qué oración voy
a hacer sobre ti, que acoges las oraciones de aquellos que te ignoran?
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”