Buscar a Dios y su plan de salvación
2011-12-15
Evangelio
Del santo Evangelio según san Lucas 7, 24-30
Cuando se fueron los mensajeros de Juan, Jesús comenzó a hablar de él a la gente
diciendo: «¿Qué salieron a ver en el desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? ¿O
qué salieron a ver? ¿Un hombre vestido con telas preciosas? Los que visten
fastuosamente y viven entre placeres, están en los palacios. Entonces, ¿qué
salieron a ver? ¿Un profeta? Sí y Yo les aseguro que es más que profeta. Es aquel
de quien está escrito: Yo envío mi mensajero delante de ti para que te prepare el
camino. Yo les aseguro que no hay nadie más grande que Juan entre todos los que
han nacido de una mujer. Y como todo, el más pequeño en el Reino de Dios es
mayor que él»
Todo el pueblo que lo escuchó, incluso los publicanos, aceptaron el designio de
justicia de Dios, haciéndose bautizar por el bautismo de Juan. Pero los fariseos y los
escribas no aceptaron ese bautismo y frustraron, en su propio daño, el plan de
Dios. Palabra del Señor.
Oración introductoria
Señor, gracias por paciente y gradualmente revelarme tu identidad, por mostrarme
el camino que me puede llevar a tu Reino si acepto y cumplo con tu voluntad. Hoy
vengo con mis dudas y mis problemas esperando encontrar en esta oración la
respuesta a mis aspiraciones porque quiero creer en todo lo que me has revelado
para crecer en el amor.
Petición
Jesús, concédeme vivir de tal forma que pueda ser un auténtico mensajero de tu
amor.
Meditación
Buscar a Dios y su plan de salvación
«Buscar a Cristo debe ser el anhelo incesante de los creyentes, de los jóvenes y los
adultos, de los fieles y sus pastores. Es preciso impulsar, sostener y guiar esta
búsqueda. La fe no es simplemente la adhesión a un conjunto de dogmas, completo
en sí mismo, que apagaría la sed de Dios presente en el alma humana. Al contrario,
proyecta al hombre, en camino en el tiempo, hacia un Dios siempre nuevo en su
infinitud. Por eso, el cristiano al mismo tiempo busca y encuentra. Precisamente
esto hace que la Iglesia sea joven, abierta al futuro y rica en esperanza para toda la
humanidad. […] El descubrimiento del "rostro de Dios" no se agota jamás. Cuanto
más entramos en el esplendor del amor divino, tanto más hermoso es avanzar en la
búsqueda, de modo que "amore crescente inquisitio crescat inventi", "en la medida
en que crece el amor, crece la búsqueda de Aquel que ha sido encontrado"»
(Benedicto XVI, 28 de agosto de 2005).
Reflexión apostólica
«La aceptación de la exigencia cristiana sólo puede ser fruto de una libertad
animada por el amor y de un hondo sentido de responsabilidad personal ante Dios,
ante la Iglesia y ante la propia conciencia. Por lo demás, la experiencia enseña que
el camino de la felicidad y la fecundidad, incluso en el plano meramente natural,
consiste precisamente en vivir con grandeza de ánimo las exigencias propias de
toda vida humana y cristiana. Es éste el «camino estrecho», pero seguro, que
Cristo propuso desde el inicio a sus discípulos» (Manual del miembro del
Movimiento Regnum Christi , n. 350).
Propósito
Hacer una oración de agradecimiento por mi bautismo, que me da la gracia para
buscar el plan de Dios.
Diálogo con Cristo
Dios mío, Tú eres el primero en querer darme lo que necesito para recibir tu amor y
tu gracia. Quiero que cuando vengas a mi corazón en la próxima Navidad, lo
encuentres preparado, transformado; para ello me esforzaré por adquirir las
virtudes humanas que más necesito para ser un auténtico discípulo y misionero de
tu amor.
«La mayoría de las veces no seguimos los caminos de Dios, no porque no los
conozcamos, sino porque nos falta entereza y valor, virtud, para seguirlos»
( Cristo al centro, n. 2208).