V Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo B
Domingo 5 de Febrero de 2012
Vocación y servicio
Estamos transitando la liturgia del tiempo ordinario o común. Es fundamental
valorizar este tiempo litúrgico de la cotidiana. Es el tiempo en donde debemos
santificarnos con las pequeñas cosas de cada Día. El texto de este Domingo (Mc.
1,29-39), también nos muestra al Señor ejerciendo su misión habitual con sus
palabras y sus gestos. “por la maana, antes que amaneciera. Jesús se levanto,
sali y fue a un lugar desierto; allí estuvo orando. Simn sali a buscarlo…., le
dijeron “todos te andan buscando”. Él le respondió: vayamos a otra parte a
predicar, en las poblaciones vecinas…” (37-39).
Al iniciar el año, es importante que todos los bautizados entendamos la necesidad
de vivir nuestra vocacin y misin. “Vocacin”, significa llamado de Dios. Nuestro
tiempo se caracteriza por acentuar el secularismo o sea una sociedad sin Dios, tiene
la dificultad para comprender la vida desde la “vocacin”, el llamado o la misin que
Dios nos encomienda a cada uno.
Es cierto de cuando hablamos de “vocacin” en general entendemos casi
exclusivamente que se trata de un llamado al Sacerdocio o la vida consagrada, pero
no es así: todos tenemos vocación . Lamentablemente la vida contemporánea
entre tantas dificultades y circunstancias, lleva muchas veces a trabajar o a
estudiar sólo pensando en la salida laboral o bien “lo que se pueda”, sin tener
suficientemente en cuenta las capacidades personales. Es triste encontrarse con
profesionales o dirigentes sociales, docentes, abogados, políticos,
sindicalistas… o lo que fuere, que ejercen una tarea o función sin tener
ninguna vocación que los mueva. Cuando pasa esto, ellos mismos terminan no
siendo felices con lo que hacen o muchas veces lo hacen mal o sólo buscan rédito
económico o bien obtener alguna forma de poder o lo peor, en general, no sirven a
los demás, sino que se sirven de lo que hacen para su propio beneficio. La Vocación
en general de toda persona, como imagen y semejanza de Dios, nos permite ser
colaboradores de Dios y constructores en el mundo con nuestro trabajo y servicio:
con más razón la vocación específica que tenemos cada uno, cuando servimos
nos plenifica. Los cristianos entendemos que la vocación es un llamado de Dios, e
implica siempre una misión. Toda tarea hecha con vocación, no sólo el hacer sino el
mismo ser de una persona, debe servir al bien común . Hoy más que nunca
necesitamos gente con vocación y la comprensión que cada vida no es
inútil, sino que está cargada de sentido y tiene razón de ser.
Entre las diversas vocaciones desde ya debemos interesarnos por las vocaciones
sacerdotales, especialmente considerando la necesidad que hay de sacerdotes en
nuestras comunidades. El mismo Señor nos invitó a orar por esto, ya que los
obreros son pocos y la mies o el trabajo es mucho. En este sentido debemos
agradecer a Dios, el camino que vamos realizando con nuestro Seminario
Diocesano “Santo Cura de Ars” . Seguimos agradeciendo a Dios las ordenaciones
sacerdotales del mes de diciembre último: Un sacerdote ordenado para la diócesis
de Oberá y cuatro para nuestra diócesis de Posadas. Ellos son el fruto de nuestro
seminario y también son un signo de esperanza para la misión evangelizadora de la
iglesia y la necesidad de sacerdotes en nuestras comunidades. También es un gozo
que los Padres Alonso Freiberger y Gervasio Silva, hayan ido a estudiar a Roma,
Teología Moral y Dogmática respectivamente; Así también como el ingreso de siete
Nuevas vocaciones en el seminario en la etapa de introductorio, todo esto aún en
medio de las dificultades y dolores que nunca están ausentes en la vida, son
motivos de agradecimiento a Dios que es causa de nuestra esperanza.
Durante este año, seguiremos caminando en el tiempo post-sinodal buscando
implementar nuestras “Orientaciones Pastorales”, que fueron las conclusiones del
sínodo. “ Este año, el lunes 18 de junio que es feriado, realizaremos nuestra
Asamblea Diocesana”, para evaluar el camino del Sínodo, acompañados por el
Concejo Pastoral de la Diócesis y un equipo operativo y animador.
El Evangelio de este Domingo, nos muestra al Señor en su misión habitual, orando,
predicando con gestos y palabras. Desde la cotidianidad del año que
iniciamos, “buscaremos ser instrumentos del anuncio del reino con sencillez
y fecundidad”.
Lesage envío un saludo cercano y hasta el próximo domingo.
+Monseñor: Juan Rubén Martínez
Obispo de Posadas.