Palabra de Dios
para alimentar tu día
Fr. Nelson Medina F., O.P
Mayo 24
Traslación de Santo Domingo de Guzmán OP
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Lecturas de la S. Biblia
Temas de las lecturas: Miren por ustedes mismos y por todo el rebaño, del que
los constituyó pastores el Espíritu Santo, para apacentar a la Iglesia de Dios *
Vayan y enseñen a todas las naciones
Textos para este día:
Hechos 20, 17-18. 28-32. 36:
En aquellos días, hallándose Pablo en Mileto, mandó llamar a los presbíteros de la
comunidad cristiana de Efeso. Cuando se presentaron, les dijo:
«Miren por ustedes mismos y por todo el rebaño, del que los constituyó pastores el
Espíritu Santo, para apacentar a la Iglesia que Dios adquirió con la sangre de su
Hijo.
Yo sé que después de mi partida, se introducirán entre ustedes lobos rapaces, que
no tendrán piedad del rebaño y sé que, de entre ustedes mismos, surgirán hombres
que predicarán doctrinas perversas y arrastrarán a los fieles detrás de sí. Por eso,
estén alerta. Acuérdense que durante tres años, ni de día ni de noche he dejado de
aconsejar, con lágrimas en los ojos, a cada uno de ustedes.
Ahora los encomiendo a Dios y a su palabra salvadora, la cual tiene fuerza para que
todos los consagrados a Dios crezcan en el espíritu».
Dicho esto, se arrodilló para orar con todos ellos.
Mateo 28, 16-20:
En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea y subieron al monte en el
que Jesús los había citado. Al ver a Jesús, se postraron, aunque algunos
titubeaban. Entonces, Jesús se acercó a ellos y les dijo:
«Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. Vayan, pues, y enseñen a
todas las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo, y enseñándolas a cumplir todo cuanto yo les he mandado; y sepan que yo
estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo».
Homilía
Temas de las lecturas: Miren por ustedes mismos y por todo el rebaño, del que
los constituyó pastores el Espíritu Santo, para apacentar a la Iglesia de Dios *
Vayan y enseñen a todas las naciones
1. No todos los milagros son "necesarios"
1.1 La fiesta de la traslación de los restos de Santo Domingo Guzmán tiene un
origen tan humilde como humildes pueden ser los huesos y restos humanos
después de unos años de haber sido enterrados. De hecho, la palabra "humilde"
viene de "humus" que , en latín, significa "tierra," como cuando una persona es en-
terrada.
1.2 Domingo fue enterrado primero en un lugar al aire libre, no lejos de donde
había muerto en Bolonia. Cuando los frailes quisieron hacer un mausoleo más
concorde con la creciente y merecida fama de santidad del gran predicador y
maestro de predicadores. Una ceremonia se preparó para abrir el sepulcro. Los
frailes temían que el espectáculo de un cuerpo mal descompuesto dejaría pésima
impresión en la numerosa multitud. Recordemos que estamos en plena Edad Media
cuando todo esto sucede y asuntos tan externos como este pueden tener un efecto
notable en la fama de un santo.
1.3 Si uno lo piensa bien, el milagro sucedido, es decir, ese perfume delicioso e
inexplicable que brotó de los huesos de Domingo no era un milagro "necesario." De
hecho, este acontecimiento tan lateral y casi anecdótico nos ayuda a preguntarnos
si los milagros son en realidad necesarios, pues el mismo Señor elogió a los que
creen sin haber visto (Juan 20,29). Lo que parece claro es que los milagros son
actos libres de la Providencia que despiertan y afianzan la fe al hacer patente el
Señorío y la cercanía de Dios.
2. El "buen olor" de Cristo
2.1 Cuando sucedió el milagro del aroma delicioso, aquella vez que trasladaron los
huesos de Santo Domingo, los frailes relacionaron de modo muy natural lo sucedido
con aquel pasaje de san Pablo: "Pues nosotros somos para Dios el buen olor de
Cristo entre los que se salvan y entre los que se pierden: para los unos, olor que de
la muerte lleva a la muerte; para los otros, olor que de la vida lleva a la vida. Y
¿quién es capaz para esto? (2 Corintios 2,15-16)
2.2 El olor tiene una capacidad de significado que ha sido subestimada, o que
apenas se valora en el mundo de la moda o del erotismo. En realidad, nuestra
Iglesia ha valorado otro tipo de olores, sintetizados especialmente en el incienso. Lo
irónico es que mientras el incienso sale de nuestras celebraciones la gente ahora lo
compra en tiendas de corte esotérico o "Nueva Era" para quemarlo en sus casas. En
esto se cumple lo de siempre: todo lo que la Iglesia descuida, otro lo aprovecha.
2.3 El olor también está vinculado al recuerdo. Cuando una persona pasa a nuestro
lado su olor permanece, a veces unos instantes, a veces por más tiempo. Dios no
tendrá que repetir con nuestros restos el milagro que al parecer se dio con los
restos de Domingo, pero sí quiere que nuestro "resto," o sea, lo que nosotros
dejemos sobre esta tierra, lleve la impronta de su amor, su verdad y su poder.
Fr. Nelson Medina, O.P.