XVIII Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo C.
San Lucas 12,13-21:
«Buscad los bienes de arriba»

Autor: Basada en el Catecismo de la Iglesia Católica

Fuente: almudi.org (con permiso)  suscribirse

 

 

Homilía basada en el Catecismo de la Iglesia Católica

««Buscad los bienes de arriba»

I. LA PALABRA DE DIOS

Si 1,2; 2, 21-23: ¿Qué saca el hombre de todo su trabajo?
Sal 94, 1-2.6-7.8-9: Escucharemos tu voz, Señor
Col 3, 1-5. 9,11: Buscad los bienes de arriba, donde está Cristo
Lc 12, 13-21: Lo que has acumulado, ¿de quién será?

II. LA FE DE LA IGLESIA

En materia económica el respeto de la dignidad humana exige la práctica de la virtud de la templanza, para moderar el apego a los bienes de este mundo; de la justicia, para preservar los derechos del prójimo y darle lo que le es debido; y de la solidaridad, siguiendo la regla de oro y según la generosidad del Señor que «siendo rico, por vosotros se hizo pobre a fin de que os enriquecieráis con su pobreza» (2 Co 8,9) (2407).

«Los bienes de la creación están destinados a todo el género humano. El derecho a la propiedad privada no anula el destino universal de los bienes» (2452).

III. TESTIMONIO CRISTIANO

«Cuando damos a los pobres las cosas indispensables no les hacemos liberalidades personales, sino que les devolvemos lo que es suyo. Mas que realizar un acto de caridad, lo que hacemos es cumplir un deber de justicia» (S. Gregorio Magno) (2446).

«El hombre, al servirse de esos bienes, debe considerar las cosas externas que posee legitimamente no sólo como suyas, sino también como comunes, en el sentido de que han de aprovechar no sólo a él, sino también a los demás» (Vaticano II, GS, 69) (2404).

IV. SUGERENCIAS PARA EL ESTUDIO DE LA HOMILÍA

A. Apunte bíblico-litúrgico

El libro del Eclesiastés recoge las enseñanzas de los antiguos sabios de Israel sobre la inutilidad de las riquezas materiales cuando se confía totalmente en ellas.

Jesús desarrolla una catequesis acerca del uso de los bienes materiales, a partir de una pregunta sobre un pleito de herencia.

Llega a su fin la lectura de la carta a los Colosenses: el Bautismo es el principio de una vida nueva que compromete a seguir una conducta pura, digna de ser vivida en Cristo resucitado.

B. Contenidos del Catecismo de la Iglesia Católica

La fe:
El destino universal de los bienes: 2402-2406.
La doctrina social de la Iglesia: 2419-2425.

La respuesta:
El respeto de las personas y sus bienes: 2407-2418.
La actividad económica y la justicia social: 2426-2436.

C. Otras sugerencias

A Jesús se le pone como juez de un pleito de herencia para repartir los bienes. Ante el Señor hemos de plantearnos el lugar que tienen los bienes materiales y la actividad económica en nuestra vida: la avaricia y codicia por ellos, las justas relaciones laborales, el uso de los bienes comunes, el abuso de los bienes propios... Los bienes materiales son un medio para vivir con dignidad, nunca un fin en sí mismos.

El Evangelio, como la primera lectura, relativizan su importancia. En nuestra vida y en nuestra sociedad se absolutizan.

El dinero y el «tener», que es bueno y necesario para la dignidad de la persona, puede, sin embargo, convertirse en un ídolo. Solo Dios es el origen, guía y meta de todo lo que hacemos y queremos en la vida.