I Domingo de Cuaresma, Ciclo A

Mateo 4, 1-11

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

Impulsos Evangélicos

1.    Analiza la sociedad en lo referente al <<pecado>>: ( Dios- lo sagrado; los demás – la sociedad; la moral – la ley; la propia conciencia...) se entienden de forma nueva. Hoy se habla más del<<pecado>> como injusticia que de <<ofensa a Dios>>; más del pecado <<colectivo>> que del <<pecado personal>>; más de pecado <<social>> que de pecado sexual.... Pues aún así el pecado se debe entender como una actitud más que como un acto aislado de la persona, que implica una  opción fundamental.

2.    Mientras exista pecado, existirá la pregunta sobre él. Es difícil ahogar el grito del mal que anida en tu corazón y te rodea por todas partes: egoísmo, odio, injusticia, hambre, guerra, pasividad. El creyente sabe que el pecado ha sido vencido por Cristo, pero desde Adán lo llevamos en nosotros como un aguijón que nos lanza hacia el Señor para no cometerlo.

3.    Creyente amigo/a: El Adviento era la preparación para  celebrar la venida del  Hijo de Dios al mundo. La Cuaresma es para celebrar dicha venida en cuanto redentora y disponernos para la Pascua.

4.    La Cuaresma no es fin en sí misma. Su finalidad es poner de relieve el misterio ya celebrado, de la Encarnación, en cuanto salvador, haciendo que el <<paso>> de Cristo, de este mundo al Padre, se plasme, como una auténtica realidad analógica, en ti mediante los sacramentos pascuales del Bautismo, la Penitencia y la Eucaristía.

5.    Jesús revive las tentaciones del pueblo judío en el desierto. Son las tentaciones típicas de los creyentes. Los pecados( tentación no superada) típicos de los creyentes y de  la Iglesia.

6.    Tentación de los <<alimentos>>. El hombre debe vivir de la confianza incondicionada en la promesa de Dios. Es la clásica tentación de hoy...a la que  puedes llamar materialismo o consumismo; de orgullo o el  deseo vano de vivir de tus apariencias.

7.    O de afán desmedido de librarte de toda dependencia, es decir , la tentación del poder. Y en el polo opuesto está Cristo que viene a salvar con el servicio y la pobreza.

8.    Por el Bautismo ya hemos sido librados por el Señor. Pero esto lleva consigo un compromiso: la lucha sincera y auténtica contra el mal.

9.    Te cuesta trabajo adaptarte a Jesús; no vives  de verdad con él como es. Vives distraído de él, poco seguro de él. Y te comportas con él como el Diablo:<< Haz esto  por mí, cambia esta situación, muéstrate un poco más, domina mejor el mundo.<<Si>> de verdad eres Hijo de Dios.

10. Eres demonio para Jesús y para ti mismo; pierdes tu oportunidad de vivir con él. Te dirá:<<¡ Aléjate de mí, listillo/a!>>.