XVIII Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo B
San Juan 6,24-35: Horizontes de plenitud

Autor: Padre Jesús E. Osorno Gil. mxy   

 

 

La vida Cristiana no se compadece jamás con mediocridades ni miopías. La seguridad o el facilismo no entran en la órbita cristiana. El proyecto de Jesús parte de una palabra simple: Superación. Esto implica desinstalación, búsqueda, hambre de sueños e ideales que se conjugan con horizontes en plenitud.

Las lecturas de hoy nos plantean un desafío triple: 1. Revestirnos de nueva humanidad. 2. Romper con esquemas inmediatistas. 3. Superar el afán de saciedad. Es un llamado exigente de la Palabra. El encuentro con esta Palabra rompe nuestros esquemas, nos libera de toda inmunidad y nos hace sensibles a los vientos de novedad y creatividad.

Pablo nos invita a dejar lo viejo, es decir, aquella carga de sentimientos, afectos, rencores, heridas que nos atan al pasado. Es todo lo que  empequeñece y delimita nuestra personalidad, nuestra visión, e incluso, nuestro futuro. Es lo que Pablo llama el “vacío de pensamiento”,  falta de iniciativas que pongan en marcha un proceso humanizador.

Los Israelitas añoran su pasado con estómagos llenos, pero atados a cadenas de esclavitud. Jesús en el evangelio irrumpe contra esta saciedad materialista, esclavista, inmediatista. Nos invita a hambres superiores donde la vida tenga sentido en libertad, donde la realización humana crezca en el espíritu en dimensión superior.

Cochabamba 02.08.09

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