Reflexiones Bíblicas
San Mateo 17, 14-20Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J
Evangelio:
En aquel tiempo se acercó a Jesús un hombre, que le dijo
de rodillas: "Señor, ten compasión de mi hijo, que tiene epilepsia y le dan
ataques: muchas veces se cae en el fuego o en el agua. Se lo he traído a tus
discípulos, y no han sido capaces de curarlo. Jesús contestó: "¡Gente sin fe y
perversa! ¿Hasta cuándo os tendré que soportar? Traédmelo". Jesús increpó al
demonio, y salió; en aquel momento se curó el niño.
Los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron aparte: "¿Y por qué no
pudimos echarlo nosotros?" Les contestó: "Por vuestra poca fe. Os aseguro que,
si fuera vuestra fe como un grano de mostaza, le diríais a aquella montaña que
viniera aquí, y vendría. Nada os sería imposible".
COMENTARIOS
El pueblo, representado en este aspecto por el hijo, tiene
exasperaciones periódicas («epiléptico»): busca salir de su situación
desesperada usando la violencia («fuego, agua»), según modelos del AT (Elías,
Moisés). Se transparenta el espíritu zelota, que provoca rebeliones armadas que
llevan al pueblo al fracaso.
Los discípulos, que siguen con la idea de los hombres, es decir, que profesan
aún el mesianismo de los letrados, no son capaces de liberar al pueblo.
La invectiva de Jesús se dirige sobre todo a los discípulos, pues el pueblo,
representado también por el padre, tiene fe en Jesús («de rodillas», «Señor») y
desea salir de su situación.
Los discípulos se extrañan de no haber sido capaces de expulsar el demonio. De
hecho, Jesús les había dado la autoridad para hacerlo; es la primera vez que se
les ofrece la ocasión, y fracasan. La razón es su falta de fe; esto es lo que
hace fracasar la misión. Un mínimo de fe sería suficiente para poner a
disposición del discípulo la potencia de Dios. El monte (Jerusalén, la doctrina
oficial) se interpone en el camino del reinado de Dios. Con la verdadera fe o
adhesión a Jesús y a su mensaje mesiánico, que comporta el cumplimiento de las
condiciones para seguirlo, serían capaces de todo.