Reflexiones Bíblicas
San Mateo 7,1-5Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J
Evangelio:
Mateo 7,1-5
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No juzguéis y no
os juzgarán; porque os van a juzgar como juzguéis vosotros, y la medida que
uséis, la usarán con vosotros. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu
hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo
puedes decirle a tu hermano: "Déjame que te saque la mota del ojo", teniendo
una viga en el tuyo? Hipócrita; sácate primero la viga del ojo; entonces
verás claro y podrás sacar la mota del ojo de tu hermano."
COMENTARIOS
«¿No reparas en la viga que tienes en tu ojo?»
Cuando un hombre se humilla por sus defectos, entonces fácilmente
aplaca a los otros, y sin dificultad satisface a los que lo odian.
Dios defiende y libra al humilde; al humilde ama y consuela; al
hombre humilde se inclina; al humilde concede gracia, y después de su
abatimiento le levanta a gran honra.
Al humilde descubre sus secretos, y le trae dulcemente a Sí y le
convida.
El humilde, recibida la ofensa, está en paz; porque está en Dios y
no en el mundo...
Ponte primero a ti en paz, y después podrás apaciguar a los otros.
El hombre pacífico aprovecha más que el muy letrado.
El hombre apasionado, aun el bien convierte en mal, y de ligero
cree lo malo. El hombre bueno y pacífico todas las cosas echa a la buena
parte.
El que está en buena paz, de ninguno sospecha.
El descontento y alterado, con diversas sospechas se atormenta: ni
él sosiega ni deja descansar a los otros. Dice muchas veces lo que no
debiera, y deja de hacer lo que más le convendría. Piensa lo que otros deben
hacer, y deja él sus obligaciones.
Ten, pues, primero celo contigo, y después podrás tener buen celo
con el prójimo.
Imitación de Cristo, tratado espiritual del siglo XV
Libro II, c. 2 y 3