Reflexiones Bíblicas

San Mateo 12,1-8

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J   

 

 

Evangelio: 

 

San Mateo 12,1-8

Un sábado de aquéllos, Jesús atravesaba un sembrado; los discípulos, que tenían hambre, empezaron a arrancar espigas y a comérselas. Los fariseos, al verlo, le dijeron: "Mira, tus discípulos están haciendo una cosa que no está permitida en sábado". Les replicó: "¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y sus hombres sintieron hambre? Entró en la casa de Dios y comieron de los panes presentados, cosa que no les estaba permitida ni a él ni a sus compañeros, sino sólo a los sacerdotes. ¿Y no habéis leído en la Ley que los sacerdotes pueden violar el sábado en el templo sin incurrir en culpa? Pues os digo que aquí hay uno que es más que el templo. Si comprendierais lo que significa "quiero misericordia y no sacrificio", no condenaríais a los que no tienen culpa. Porque el Hijo del hombre es señor del sábado."

COMENTARIOS

Jesús invita a aceptar su yugo, imagen de las exigencias que se derivan de su mensaje; su yugo es llevadero, no como el de la Ley propuesta por los letrados, y su carga es ligera (cf. 23,4). Estudiar la Ley debía servir para acercarse a Dios; Jesús invita a acercarse a él directamente; su persona es el medio ( la Ley ) y el término (Dios). Invita a romper con otros maestros y a aceptar su enseñanza. El legalismo judío era abrumador, una moral sin alegría. Jesús propone, en cambio, el servicio en la alegría de la amistad (9,15). Propone sus exigencias prometiendo la felicidad (bienaventuranzas).