Reflexiones Bíblicas

San Lucas 7,19-23

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J   

 

 

Evangelio:  

San Lucas 7,19-23

En aquel tiempo, Juan envió a dos de sus discípulos a preguntar al Señor: "¿Eres tú el que ha de venir, o tenemos que esperar a otro?" Los hombres se presentaron a Jesús y le dijeron: "Juan, el Bautista nos ha mandado a preguntarte: "¿Eres tú el que ha de venir, o tenemos que esperar a otro?""
Y en aquella ocasión Jesús curó a muchos de enfermedades, achaques y malos espíritus, y a muchos ciegos les otorgó la vista. Después contestó a los enviados: "Id a anunciar a Juan lo que habéis visto y oído: los ciegos ven, los inválidos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia el Evangelio. Y dichoso el que no se escandalice de mí."

COMENTARIOS

Juan ha escuchado la obra profética de Jesús en Galilea, y envía a preguntarle si es el Mesías, el esperado. El Mesías esperado por los discípulos de Juan era más que todo un rey nacionalista que iba a liberar al pueblo de Israel del poder de los romanos; un Mesías guerrero que vendría a vengar todo el sufrimiento que había sobrellevado el pueblo. Pero Jesús da señales contrarias a estas pretensiones: no es un rey de guerras y venganzas, sino de misericordia y de amor.
Jesús, con sus acciones, les da testimonio de que realmente es el Mesías. Para esto les hace "ver y oír". Luego los envía a dar testimonio de lo que han visto y oído. Vale mucho más la experiencia personal con Jesús cuando se transmite a otros, en este caso a Juan.
El anuncio del reino es testimonial, pasa por las reparaciones de las injusticias, de las dolencias, del ataque frontal al pecado y a todo aquello que genera desigualdad entre los hombres. Dar testimonio de Jesús y de su proyecto es nuestra misión hoy. Jesús es el Mesías y hace una opción concreta: los necesitados; ellos son los primeros destinatarios de la Buena Noticia. Para nosotros, ¿cuál es nuestra propia experiencia personal con Jesús? ¿Realmente estamos optando por los necesitados? ¿Y con qué acciones concretas estamos dando testimonio de lo que vemos y oímos cada día de Jesús?