Reflexiones Bíblicas

San Juan 16,12-15

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J



Todavía tengo muchas cosas que decirles, pero ustedes no las pueden comprender ahora. Cuando venga el Espíritu de la Verdad, él los introducirá en toda la verdad, porque no hablará por sí mismo, sino que dirá lo que ha oído y les anunciará lo que irá sucediendo. El me glorificará, porque recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes. Todo lo que es del Padre es mío. Por eso les digo: 'Recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes'. 

Leer el comentario del Evangelio por : John Henry Newman (1801_1890) presbítero, cardenal, fundador del oratorio de S. Felipe Neri en Inglaterra 

"Cuando venga el Espíritu de la verdad, os iluminará para que podáis entender la verdad completa." (Jn 16,13)

El Paráclito, el Consolador que es una sola cosa con el Hijo, siendo el Espíritu que procede del Hijo ¿cómo, manifestándose él mismo, habría podido hacer otra cosa que manifestar el Hijo al mundo? ¿Cómo podía hacer otra cosa que proyectar una luz nueva sobre aquel cuya muerte en cruz abrió al Espíritu Santo el acceso al corazón del hombre? Con todo, aunque la partida del Hijo es útil para que el Consolador venga (cf Jn 16,7), no hay que perder nunca de vista al Hijo en presencia del Consolador. Cristo mismo ¿no dijo a sus apóstoles: ‘él me glorificará.’?

¿Cómo glorifica el Espíritu al Hijo de Dios? Revela que aquel que se tenía por hijo del hombre es el Hijo único de Dios. Nuestro Señor había declarado todo lo que nos hacía falta, pero sus apóstoles no lo habían comprendido. Incluso, confesando su fe con convicción bajo la acción secreta de la gracia, no comprendieron todo lo que ellos afirmaron... ¿No tuvo a bien el Salvador velar su secreto? ¿No parece que él haya querido que conociéramos su secreto, no en un principio sino después? Como si sus palabras tuvieran que esperar todavía mucho tiempo para adquirir su interpretación divina.

Esto es lo que el Señor reservó para el momento de la venida de aquel que él enviaría. El Espíritu revelará a plena luz sus palabras...Sólo después de la Resurrección de Cristo, e incluso después de la Ascensión, el Espíritu desciende sobre ellos. Entonces los apóstoles comprenden, por fin, quien había estado con ellos. San Juan escribe: "...cuando Jesús resucitó de entre los muertos, los discípulos recordaron lo que había dicho, y creyeron en la Escritura y en las palabras que él había pronunciado." (Jn 2,22)