Reflexiones Bíblicas

San Lucas 6,39-42

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J

 

 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos una parábola: "¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? Un discípulo no es más que su maestro, si bien, cuando termine su aprendizaje, será como su maestro. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: "Hermano, déjame que te saque la mota del ojo", sin fijarte en la viga que llevas en el tuyo? ¡Hipócrita! Sácate primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la mota del ojo de tu hermano." 

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Lucas presenta tres situaciones que ponen al descubierto los sentimientos arraigados en el corazón humano. La ceguera, la inferioridad del discípulo con respecto del maestro y la mota y la viga en el ojo. El contexto de estas comparaciones es la creciente controversia con escribas y fariseos. Pero no sólo por parte de Jesús sino de la naciente comunidad cristiana.

La ceguera mental y religiosa de los fariseos no sólo los afecta a ellos sino que también afecta a sus seguidores y al pueblo en general de quien se pretendían maestros y guías. Ellos están formando a otros como sus sucesores que llegarán a ser como ellos, aunque ahora sean inferiores. Pero también llama la atención sobre los falsos maestros que se infiltraban al interior de la comunidad para confundirla y desorientarla. Sólo quien tiene autoridad moral puede corregir al que está equivocado. La mejor manera de orientar y corregir a alguien es por medio del testimonio. 

También celebramos hoy la memoria de San Pedro Claver. Catalán y Jesuita dedicó su vida en Cartagena de indias a la evangelización de los esclavos negros traídos del África. Por eso se le ha llamado el apóstol de los esclavos. Aunque no luchó abiertamente contra el sistema esclavista, sí se puso al servicio de ellos. Como se ha dicho, se convirtió en el esclavo de los esclavos. A pesar de los cuestionamientos que se pueda hacer a la práctica asistencial de Pedro, llama la atención el testimonio de entrega para aliviar las penas y dolores de estas personas maltratadas por el sistema colonial. 

Hagamos de nuestra vida cristiana un testimonio capaz de cuestionar y convencer a todos, mediante el servicio generoso y desinteresado a los hermanos más débiles.