Reflexiones Bíblicas
San Lucas 6, 6-11

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J

 

 

Un sábado, entró Jesús en la sinagoga a enseñar. Había allí un hombre que tenía parálisis en el brazo derecho. Los letrados y los fariseos estaban al acecho para ver si curaba en sábado, y encontrar de qué acusarlo. Pero él, sabiendo lo que pensaban, dijo al hombre del brazo paralítico: "Levántate y ponte ahí en medio". El se levantó y se quedó en pie. Jesús les dijo: "Os voy a hacer una pregunta: ¿Qué está permitido hacer en sábado: hacer el bien o el mal, salvar a uno o dejarlo morir?" Y, echando en torno una mirada a todos, le dijo al hombre: "Extiende el brazo". 

El lo hizo, y el brazo quedó restablecido. Ellos se pusieron furiosos y discutían qué había que hacer con Jesús. 

DOCUMENTO

Había en la sinagoga un hombre postrado por la enfermedad. Su abatimiento era símbolo de la marginación social a la que estaba sometido. Su mano derecha paralizada le impedía desempeñarse laboralmente y, además, constituía un defecto que lo convertía en un ser impuro. La interpretación oficial de la Ley lo mantenía en una condición de hombre marginado.

Jesús se opone a esto y, en nombre de la dignidad humana y de la misericordia divina, restablece la dignidad de la persona. Primero, le pide que se levante, que no se siga considerando a sí mismo como un ser de poco valor. Para Jesús, la enfermedad, el pecado y las carencias humanas no le restan dignidad al ser humano. Luego, apela al sentido liberador de la ley para cuestionar las prácticas opresoras de los «ortodoxos». Ante el silencio encubridor de las morales inhumanas, restablece el valor de la persona a los ojos de la comunidad. Sus opositores se ofenden y se cierran a la interpelación divina.

Hoy vivimos la misma disyuntiva. Sacralizamos leyes que unos pocos han hecho a favor de un élite, pero nos quedamos callados cuando irrespetan nuestros derechos. Creemos en la razón de los legisladores, pero no atendemos a la justicia de los profetas. Todo esto, porque confundimos lo justo con lo legal.