Reflexiones Bíblicas
San Lucas 17, 7-10Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J
En aquel tiempo dijo el Señor: "Suponed que un criado vuestro trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, ¿quién de vosotros le dice: "En seguida, ven y ponte a la mesa"? ¿No le diréis: "Prepárame la cena, cíñete y sírveme mientras como y bebo, y después comerás y beberás tú"? ¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado? Lo mismo vosotros: Cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: "Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer.""
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Este pasaje no lo podemos aislar del resto de enseñanzas e instrucciones que Jesús viene dando a sus discípulos, así como tampoco podemos ignorar el trasfondo de la problemática de la primitiva comunidad para la que Lucas escribe. A este paso, quienes supuestamente estaban al día en sus obligaciones legales, cultuales y rituales, se sentían los mejores, los perfectos, los que creían tener el derecho a sentarse a la mesa para ser servidos por su amo.
Se ve pues, que en la comunidad lucana se presentaba ya esa misma tendencia a imponer criterios del antiguo legalismo judío. Es que a la hora de la verdad, es mucho más cómodo cumplir con lo que siempre se ha hecho, cumplir es menos pesado que arriesgarse a realizar, a poner en práctica lo que Dios quiso desde el principio: amor y misericordia, acción y compromiso con los ignorados de la sociedad.