Reflexiones Bíblicas
San Mateo 7, 1-5

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara S.J

 

 

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: "No juzguéis y no os juzgarán. Porque os van a juzgar como juzguéis vosotros, y la medida que uséis, la usarán con vosotros. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: "Déjame que te saque la mota del ojo", teniendo una viga en el tuyo? Hipócrita: sácate primero la viga del ojo; entonces verás claro y podrás sacar la mota del ojo de tu hermano".

COMENTARIOS

Los seres humanos tendemos con facilidad a detectar los defectos en las demás personas pero nos cuesta darnos cuenta de nuestras propias limitaciones. La calumnia, la murmuración, la injuria se han convertido en normas habituales de conducta. Resulta fácil quitar crédito a personas, grupos u organizaciones aún a costa de la honra y hasta de la vida misma.
Pero que difícil resultad reconocer los propios errores. Normalmente tendemos a justificarnos o a culpar a los demás. Y no solamente en el ámbito de lo personal. También ocurre en el ámbito de lo social e institucional. Qué difícil resulta la coherencia de vida...
Jesús es la persona de autoridad moral por excelencia. Sus palabras están perfectamente respaldadas por la forma de vida. Teoría y práctica confluyen coherentemente en la praxis de Jesús. Esa es precisamente la invitación a sus seguidores. Mientas las palabras y los discursos no los respaldemos con la vida no seremos creíbles. Hoy las instituciones sociales necesitan recuperar la credibilidad que han perdido por la doble moral que manejan. Nosotros tenemos la misión de contribuir para que los ambiente en que nos movemos alcancen coherencia de vida entre sus principios, sus actitudes y acciones.