Reflexiones Bíblicas

San Marcos 6,7-13

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara, S.J.


Entonces llamó a los Doce y los envió de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus impuros. Y les ordenó que no llevaran para el camino más que un bastón; ni pan, ni alforja, ni dinero; que fueran calzados con sandalias, y que no tuvieran dos túnicas. Les dijo: "Permanezcan en la casa donde les den alojamiento hasta el momento de partir. Si no los reciben en un lugar y la gente no los escucha, al salir de allí, sacudan hasta el polvo de sus pies, en testimonio contra ellos". Entonces fueron a predicar, exhortando a la conversión; expulsaron a muchos demonios y curaron a numerosos enfermos, ungiéndolos con óleo. 

Comentario del Evangelio por La carta a Diogneto (hacia 190) 

“Se extrañaba de su falta de fe”


El Padre ha enviado al Verbo para manifestarlo al mundo. Este Verbo fue despreciado por los suyos; pero, por la predicación de los apóstoles, los pueblos gentiles creyeron en él. El Verbo existía desde el principio y se manifestó en los tiempos más recientes. Aunque existe desde siempre, nace constantemente en el corazón de los santos. Es proclamado como Hijo en un hoy eterno. (Sal 2,7)

Por él, la Iglesia se enriquece de la gracia que se derrama y se acrecienta en el corazón de los santos; les confiere la inteligencia espiritual, les revela los misterios sagrados y les hace comprender los signos de los tiempos. La Iglesia se regocija por la fe de sus fieles; se ofrece a aquellos que la buscan y respetan los compromisos de la fe y las indicaciones de los Padres. Desde ahora, el temor de la Ley inspira cantos de alabanza, la gracia anunciada por los profetas se ha hecho manifiesta, la fe evangélica queda reforzada, la tradición de los apóstoles queda intacta y la gracia hace regocijar en danzas a la Iglesia.

Si no entristeces a la gracia conocerás los secretos que el Verbo comunica por quien quiere y cuando quiere...Si os acercáis i prestáis atención sabréis todo lo que Dios concede a los que le aman de verdad.