Reflexiones Bíblicas

San Marcos 16,9-15

Autor: Padre Juan Alarcón Cámara, S.J.

 

 

Jesús, resucitado al amanecer del primer día de la semana, se apareció primero a María Magdalena, de la que había echado siete demonios. Ella fue a anunciárselo a sus compañeros, que estaban de duelo y llorando. Ellos, al oírle decir que estaba vivo y que lo había visto, no la creyeron. Después se apareció en figura de otro a dos de ellos que iban caminando a una finca. También ellos fueron a anunciarlo a los demás, pero no los creyeron. Por último, se apareció Jesús a los Once, cuando estaban a la mesa, y les echó en cara su incredulidad y dureza de corazón, porque no habían creído a los que lo habían visto resucitado. Y les dijo: "Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación." 

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Este último relato es lo que se llama un ‘final canónico’ o sea, el texto aceptado por la tradición de la iglesia. En este relato aparece un resumen de los otros relatos de apariciones del resucitado. La primera parte es un resumen de la aparición a la Magdalena que encontramos en el evangelio de Marcos (Mc 16, 1-8), Mateo (Mt 28, 1-8), Lucas (Lc 24, 1-10) y Juan (Jn 20 11-18). Luego una mención al episodio de los discípulos de Emaús (Lc 13-35) y, por último, la aparición a los Once (Mt 28, 16-20; Lc 24, 36-43; Jn 20, 24) 1ue llegó ha hacer parte de la catequesis de la comunidad primitiva.

La persona que agregó esta última sección al evangelio tenía, con toda seguridad, la intención de mostrar cual fue el camino que la comunidad cristiana emprendió después de la resurrección del Señor. El anuncio que recomenzó en Galilea se extendió por todos los confines del mundo conocido, ya no limitado al pequeño grupo de hombres y mujeres de origen judío y galileo, sino que alcanzó a ‘toda la creación’. Esta sección del evangelio nos invita a continuar el relato de Marcos en los relatos de apariciones de los otros evangelios y, en especial, al relato de la misión de la iglesia en los Hechos de los Apóstoles. El anuncio de la resurrección de Jesús es una experiencia que puede transformar la realidad porque «el reino no es otro mundo, sino este mundo totalmente otro».