VI Domingo de Pascua , Ciclo C.

Autor: Padre Julio Alonso Ampuero 

Fuente: Libro: Meditaciones bíblicas sobre el Año litúrgico
Con permiso de la Fundacion Gratis Date



Test de amor
Jn 14,23-29

«Haremos morada en él». He aquí el fruto principal de la Pascua. La mayor realización del amor de Dios. El amor busca la cercanía, la intimidad, la unión. Dios no nos ama a distancia. Su deseo es vivir en nosotros, inundarnos con su presencia y con su amor. Esta es la alegría del cristiano en este mundo y lo será en el cielo. Somos templos, lugar donde Dios habita. Hemos sido rescatados del pecado para vivir en su presencia. ¿Cómo seguir pensando en un Dios lejano? Lo que deberemos preguntarnos es cómo recibimos esta visita, cómo acogemos esta presencia.
«El que me ama guardará mi palabra». Esta es la condición para que las Personas divinas habiten en nosotros: amar a Cristo. Lo cual no es un puro sentimiento, sino que supone «guardar su palabra», la actitud de fidelidad a Él y cada una de sus enseñanzas. Por el contrario, «el que no me ama no guardará mis palabras». Encontramos aquí un test para comprobar la autenticidad de nuestro amor a Cristo. Dios comprende y perdona los fallos, pero no puede aceptar al que reniega del evangelio.
«Él os lo enseñará todo». Estamos a la espera de Pentecostés y es conveniente conocer lo que el Espíritu Santo quiere hacer en nosotros. Él es el Maestro interior y su acción es necesaria para entender las palabras de Cristo. Si él no ilumina, si no hace atractiva la palabra de Cristo, si no da fuerzas para cumplirla, nunca llegaremos a vivir el evangelio. Sin él, el evangelio queda en letra muerta; sólo el Espíritu da vida (2 Cor 3,6).