Domingo de Ramos en la Pasión del Señor, Ciclo B.
San Marcos 11, 1-10: Entrada triunfal de Cristo en Jerusalén
Autor: Padre Marcelino Izquierdo OCD
Isaías 50, 4-7
Salmo 21
Filipenses 2, 6-11
San Marcos 11, 1-10
Entrada triunfal de Cristo en Jerusalén
Iniciamos hoy la semana conocida en el pueblo cristiano como "Semana Santa".
Semana que litúrgicamente lleva el sobrenombre de "Semana Mayor". San Marcos
inicia este tiempo sagrado con estas palabras: "Pasión de Nuestro Señor
Jesucristo". Es decir, dolor, sufrimiento, muerte de Nuestro Señor Jesucristo.
Si nos impresiona la muerte de todo ser humano, ¿qué impresión debiera causarnos
la muerte de un "Dios-Hombre"? No sé qué impresiona más al ser humano, la
contemplación de un "Niño-Dios", recostado en el madero de un pesebre; o la
contemplación de un "Dios-Hombre" colgado de un madero de en la Cruz?
Esta mañana ha llenado todos los rincones de la tierra el grito de triunfo de
"¡Hosanna! Y no ha podido menos de asaltarme este pensamiento: a través de todos
los siglos: ¿cuántos millones de gentes no habrán gritado, y seguirán gritando
alborozados, tal día como hoy ¡Hosanna! Pertenencia con todo derecho a la
liturgia judía.
En la Fiesta judía de los Tabernáculos o de las Tiendas- la gente solía llevar
palmas. En el lenguaje ordinario, se llamaban precisamente "hosannas". Y estaban
llamadas a entrar muy pronto en la celebración cristiana. Y, a través de ese
camino, esta palabra hebrea, sería aceptada por todas las lenguas, encerrando en
todas ellas, "un grito festivo a la vida y a la esperanza".
Al comenzar la Semana Santa debiera surgir en nosotros este interrogante: ¿Cuál
es mi puesto, qué lugar ocupo yo en esta escena?
No sé si Barrabás, una vez muerto Cristo, subió o no al Calvario. Ahora, si
subió, por necesidad, debió asaltarle este pensamiento, al ver a Cristo
pendiente del madero: "Este hombre está colgado del madero de la cruz por mí".
Grito que siempre que viéramos una Cruz debiera salir de nosotros: "Este hombre
está ahí por mí".
La Pasión de Cristo vuelve a comenzar otra vez. Hubo alguien que dijo: "Jesús
está siempre crucificado, está sangrando siempre, siempre expirando".
Y es que la historia se repite. El Evangelio no es una leyenda. Tampoco es una
historia del "pasado". Es algo de tanta actualidad que nos refleja a nosotros
tal cual somos. Y hoy& no somos ni mejores ni peores que los contemporáneos de
Cristo. Somos, nadie se extrañe, más o menos iguales.
En el drama de la Pasión, no de ayer, sino de hoy, desempeñamos los mismos
papeles que los hombres de ayer. También nosotros somos actores en este drama.
Hoy, como ayer, se repetirán las mismas escenas. Habrá hombres y mujeres
indiferentes, cansados, meros espectadores. Unos nuevos Pilatos que se lavan las
manos. Cobardes, manejados por el respeto humano, que se avergüenzan de ayudar a
llevar la cruz a los demás. Mirones, para quienes las injusticias, los
desórdenes, pasarán por delante de sus ojos sin dejar una huella de compasión.
A cada momento pasan a nuestro lado víctimas, hoy más que nunca, que se asemejan
a Cristo: justos que sufren, inocentes perseguidos, hambrientos en el cuerpo y
en el alma, sedientos de consuelo, amor y alegría& Miles de niños, que apenas
han abierto los ojos a la vida, y se encuentra con la muerte, porque su madre no
tiene una gota de leche en sus flácidos pechos.
Pasará también, la misma víctima dolorida, infinitamente paciente y llena de
amor, dirigiendo su mirada de ternura, de interrogación, de espera, de reproche.
Sí, si, esa mirada se clava en nosotros. No dirijamos la vista hacia otra parte.
Y frente a todas estas víctimas, somos nosotros los Pilatos, los cobardes, los
indiferentes, los hombres y mujeres del siglo XXI, los que nos tenemos por
buenos, los que criticamos a los escribas y fariseos, los que no comprendemos la
actitud de los sayones.
"Semana Santa": Días de recogimiento. Horas de reflexión. Días de sentir en
nuestra carne la pasión de los otros, como Cristo sintió en su propia carne, la
nuestra.
Detente, piensa y reflexiona: "¿qué lugar vamos a ocupar frente a los "cristos"
de hoy, en la pasión de todos los días?