Lucas 14, 1-6:
El que comenzó en ustedes esta obra, la irá perfeccionando hasta el día de la venida de Cristo Jesús * Si a alguien se le cae al pozo su burro o su buey, ¿no lo saca aunque sea sábado?

Autor: Fr. Nelson Medina F., O.P
Sitio Web:
fraynelson.com  

 

Lecturas de la S. Biblia

Temas de las lecturas:
El que comenzó en ustedes esta obra, la irá perfeccionando hasta el día de la venida de Cristo Jesús * Si a alguien se le cae al pozo su burro o su buey, ¿no lo saca aunque sea sábado?

Textos para este día:

Filipenses 1, 1-11:

Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos que in en Filipos, con sus obispos y diáconos. Os deseamos la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo.

Doy gracias a mi Dios cada vez que os menciono; siempre que rezo por todos vosotros, lo hago con gran alegría. Porque habéis sido oradores míos en la obra del Evangelio, desde el primer día hasta hoy. Ésta es mi convicción: que el que ha inaugurado entre vosotros una empresa buena la llevará adelante hasta el día de Cristo Jesús. Esto que siento por vosotros está plenamente justificado: os llevo dentro, porque, tanto en la prisión como en mi defensa y prueba del Evangelio, todos compartís la gracia que me ha tocado.

Testigo me es Dios de lo entrañablemente que os echo de menos, en Cristo Jesús. Y ésta es mi oración: que vuestro amor siga creciendo más y más en penetración y en sensibilidad para apreciar los valores. Así llegaréis al día de Cristo limpios e irreprochables, cargados de frutos de justicia, por medio de Cristo Jesús, a gloria y alabanza de Dios.


Lucas 14, 1-6:

Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando.

Se encontró delante un hombre enfermo de hidropesía y, dirigiéndose a los maestros de la Ley y fariseos, preguntó:

-«¿Es lícito curar los sábados, o no?»

Ellos se quedaron callados.

Jesús, tocando al enfermo, lo curó y lo despidió.

Y a ellos les dijo:

-«Si a uno de vosotros se le cae al pozo el hijo o el buey, ¿no lo saca en seguida, aunque sea sábado?»

Y se quedaron sin respuesta.


Homilía

Temas de las lecturas: El que comenzó en ustedes esta obra, la irá perfeccionando hasta el día de la venida de Cristo Jesús * Si a alguien se le cae al pozo su burro o su buey, ¿no lo saca aunque sea sábado?

1. Evangelización a Escala Humana

1.1 Pablo evidentemente entregó de su propio corazón a cada una de las comunidades que gestó o ayudó a crecer. El amor fue su gran motor, como él mismo dijo en una ocasión: "el amor de Cristo nos apremia" (2 Cor 5,14). Mas ese amor no siempre ni en su mayor parte fue correspondido. Una notable excepción fue esta comunidad de Filipos. Los lazos que de allí surgieron tuvieron siempre el sello de una cálida y entrañable amistad, y ello se nota en la Carta que hemos empezado a escuchar en la primera lectura de hoy.

1.2 Expresiones muy particulares de este afecto son: "Siempre que me acuerdo de ustedes, doy gracias a mi Dios"; "cuando rezo por ustedes lo hago con gran alegría"; "ustedes han colaborado en la propagación del Evangelio"; "a ustedes los llevo en mi corazón"; "a todos los amo entrañablemente en Cristo Jesús": ¡no hay nada parecido en el resto de los escritos de este gran apóstol! Todo esto, más allá del plano de la estricta confidencia, nos permite asomarnos por una ventana privilegiada al aspecto humano de la evangelización, por llamarlo de esa manera.

1.3 Más interesante aún es ver qué hace Pablo con todo ese cariño. No es un puro efluvio de sentimientos limpios y bellos; se traduce en oración por intenciones específicas, básicamente por el crecimiento en la fe, el amor y las demás virtudes. Es un ejemplo notable de unión entre afectividad humana y caridad sobrenatural y teologal.

2. ¿Cómo hacía sus milagros Jesús?

2.1 Anda por ahí un libro que ofrece un Curso de Milagros. El tema es ya un tópico en las librerías. Tenía que llegar, después de tantas terapias y millones de formas de autoayuda, tenía que venir este que pone el poder en nuestras manos.

2.2 Lo gracioso es que esa literatura tiene toda un mismo patrón: relájese, mente en blanco, concentre su energía... Y digo que eso es gracioso porque muy poco o nada tiene que ver con los milagros que hace Jesús. ¿Has visto a Jesús poniendo la mente en blanco en alguna parte de los evangelios? ¿Has visto cómo se reconcentra antes de sanar a alguien? ¡Pamplinas! Lo que vemos es a un profeta que, aun en medio de una desagradable discusión, muestra de dónde viene el poder que realmente sana y salva.

2.3 Jesús, entonces, no es un milagrero. Su poder no es la canalización de una energía cósmica o psíquica, que pueda ser enseñado como quien aprende a resolver ecuaciones de segundo grado, o a plantar un bonsái. Cristo es la manifestación sublime del amor del Padre, no la exhibición de nuestras destrezas mentales