Dedicación de la Basílica de San Juan de Letrán

San Juan 2, 13-22

Autor: Monseñor Rubén Oscar Frassia 

 

 

Evangelio según San Juan 2, 13-22 (ciclo A)

 

En primer lugar tenemos que afirmar que la fiesta de la Dedicación de la Basílica de Letrán, está dedicada al Divino Salvador. Y los dos patronos principales de esta Basílica Catedral de Roma, son San Juan Bautista y San Juan Evangelista. Es la primera Iglesia de Roma y la primera catedral del mundo. Es muy importante ya que se trata de la cátedra del Papa. La cátedra del Papa no es la Basílica de San Pedro, es San Juan de Letrán. Es allí donde está Pedro y allí donde está Pedro está la Iglesia Catedral.

 

Luego, por razones históricas, el Santo Padre habla desde la Basílica de San Pedro, pero la primera y más importante es San Juan de Letrán. Es la Iglesia que preside, en la caridad, a todas las demás iglesias. Es la que nos liga, nos une, nos vincula a todos. Esta unión no está dad por los ladrillos materiales sino por el espíritu. De allí dimana la Gracia del Corazón abierto de Jesús, el Salvador del mundo, el que nos salva a todos.

 

Por eso debemos estar conectados con la Iglesia de Roma, porque allí los Apóstoles Pedro y Pablo dieron la vida por Cristo a través del martirio. Esta vinculación es importante tenerla, reconocerla, sostenerla y alimentarla a través de la solidaridad y la comunión. Nos somos un eslabón perdido, nos somos un ladrillo cualquiera; estamos vinculados por Cristo, el Salvador. Desde allí todo se relaciona, en ese antes, en ese después, aquí y allá, en todas partes.

 

Evangelio: Jesús echa a los mercaderes del Templo

 

Lo que Cristo quiere de nosotros es que lo adoremos en espíritu y en verdad. Uno puede decir “¡qué barbaridad estos cambistas que hacían un comercio de la Casa de Dios!”, sin embargo ahora, ¿nosotros qué hacemos?, ¿cómo nos acercamos?, ¿cómo estamos presentes en la Casa de Dios?, ¿con qué actitud vamos? ¿La actitud del arrogante o la actitud del otro, del que pide perdón?, ¿la actitud del fariseo o la actitud del publicano?

 

En Siena, Italia, a la entrada de la Iglesia catedral, hay dos mármoles labrados con las dos figuras: la del fariseo que mira con arrogancia y la del publicano que se golpea el pecho pidiendo perdón y mira hacia abajo. ¿Con qué actitud vamos a la Iglesia ?, ¿con qué actitud decimos que somos cristianos?, ¿cómo nos comportamos la decir que somos católicos?, ¿con qué actitud?, ¿para sacar o para entregar?, ¿para agradecer o para ser mezquinos?, ¿abierto el corazón o somos terribles calculadores de los beneficios que Dios nos puede dar y de los intereses que podemos obtener? ¡Cuidado con esto!

 

Pidamos al Señor tener esa capacidad de humildad y saber que estamos vinculados, por la fe y por la caridad, con la Iglesia que está presente en todas partes del mundo. Sobre todo en Roma, allí en San Juan de Letrán, la primera catedral del mundo dedicada al Divino Salvador.

 

Que recemos especialmente por el Santo Padre, el Vicario de Cristo, “el dulce rostro del Jesús en la tierra”, como decía Santa Catalina de Siena.

 

Que estemos siempre vinculados y no rompamos la comunión por nada.

 

Queridos hermanos, les dejo mi bendición, en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.