La Sagrada familia, Ciclo A
La Voz Católica
Arquidiócesis de Miami
Ministerio de formación cristiana 


Lectura del Evangelio según San Mateo 2:13-15,19-23

  Después que partieron los Magos, el Ángel del Señor se le apareció en sueños a José y le dijo: “Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto*. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes buscará al niño para matarlo”. José se levantó, tomó de noche al niño y a su madre y se retiró a Egipto. Permaneció allí hasta la muerte de Herodes. De este modo se cumplió lo que había dicho el Señor por boca del profeta: “Yo llamé de Egipto a mi hijo”.** Después de la muerte de Herodes, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José, en Egipto. Le dijo: “Levántate y regresa con el niño y su madre a la tierra de Israel, porque ya han muerto los que querían matar al niño”. José, pues, se levantó, tomó al niño y a su madre, y se vino a la tierra de Israel. Pero temió ir a Judea, sabiendo que allí reinaba Arquelao en reemplazo de Herodes, su padre. Siguiendo un aviso que recibió en sueños, se retiró a Galilea, y fue a vivir en un pueblo llamado Nazaret. Así había de cumplirse lo que dijeron los profetas: “Le dirán nazareno”.

* Los que huían de los peligros en Palestina usualmente se refugiaban en Egipto. ** Oseas 11:1.

Comentario breve:

Mateo es el único evangelista que relata la huída a Egipto. Es interesante que esta sea la lectura que la Iglesia escoge para este domingo, destacando así que la familia de Jesús vivió como todas las demás familias judías de la época y sufrió también los abusos de Herodes. Mateo también resalta las raíces judías de Jesús y lo presenta como el nuevo Moisés quien revive el éxodo de Israel. Las narrativas de cómo Jesús fue a Egipto y después a Nazaret siguen un mismo patrón: el ángel se aparece a José en sueños tal y como lo había hecho anteriormente al anunciarle el nacimiento de Jesús. José es el hombre dispuesto a dejar a un lado sus necesidades por el bien de su esposa e hijo, y como todo padre de familia tuvo que cuidar de la paz y la seguridad de los suyos. María, por su parte, sufrió contratiempos no sólo en el momento de dar a luz, sino durante los primeros años de su hijo amado. Las familias de hoy pueden ver que la Sagrada Familia no disfrutó de ningún privilegio especial y que el sufrimiento y los cambios fueron parte de su realidad diaria.

Tres ideas importantes: de la lectura:

  • El misterio de la encarnación, la Palabra hecha carne, nos enseña que, en Jesús, Dios asumió nuestra humanidad con todas las limitaciones que esto conlleva.

  • Huyendo de los peligros de Palestina, Jesús, José y María vivieron como refugiados en un país extranjero.

  • José y María estuvieron siempre dispuestos a seguir los mensajes de Dios aún cuando éstos les causaban contratiempos.

Para la reflexión:

1. ¿Estoy dispuesto a dejar a un lado mis gustos y deseos por el bien de mi familia?

2. ¿Puedo ver a la Sagrada Familia en los refugiados y exiliados de hoy? ¿Qué trato creo que merecen?